Hamaikabat mantendrá su carácter jurídico de partido «de manera transitoria» durante esta legislatura para apoyar a la docena de concejales que fueron elegidos bajo sus siglas en los pasados comicios municipales, pero inicia un proceso de transformación con vistas a convertirse en una mera «plataforma plural», al haber constatado que «no está en el ánimo de nadie emprender viajes hacia otros partidos», según explicó ayer el propio presidente de la formación, Iñaki Galdos.

Explicó también que, una vez realizada la «reflexión necesaria a partir de la debacle electoral del pasado 22 de mayo», su partido inicia un «proceso de transformación». Galdos hizo estas declaraciones, recogidas por Europa Press, tras la celebración de la Asamblea Extraordinaria de H1!, en Donostia, en la que se aprobó por unanimidad la Propuesta de Resolución, con la práctica totalidad de las 19 enmiendas presentadas por la militancia, en la que se determina esta decisión.

Confirmó que Hamaikabat «da por concluida su trayectoria como un partido de ámbito nacional al uso», para pasar a convertirse en una plataforma que tratará de debatir y hacer propuestas a futuro en torno al nacionalismo y «las necesidades de Euskal Herria».

No obstante, puntualizó que aún hay doce concejales que «merecen el apoyo» de Hamaikabat, y serán éstos quienes conformen una gestora que será la encargada de «organizar y redimensionar» el partido en esta fase transitoria. Además, los asistentes a la Asamblea decidieron «dejar en manos de una comisión promotora» la responsabilidad de decidir sobre «las fórmulas jurídicas concretas que se decidan en el futuro».

Preguntado por la posibilidad de que, una vez iniciado este proceso, los militantes y cargos de H1! puedan pasar a formar parte de otras formaciones, Galdos aseguró que «se ha detectado de manera unánime que no está en el ánimo de nadie emprender viajes hacia otros partidos».

Contra el polo soberanista

Hamaikabat comienza a desaparecer oficialmente cuando apenas se han cumplido dos años desde que un nutrido grupo de dirigentes de EA en Gipuzkoa decidiera romper con esta formación. Molestos ante la apuesta que se había hecho por una estrategia encaminada a impulsar un «polo soberanista», distanciándose del PNV, los escindidos se quedaron con la mayoría de los cargos institucionales que EA había logrado en Gipuzkoa en las elecciones de 2007.

Iñaki Galdos, por ejemplo, siguió siendo hasta hace un mes primer teniente de diputado general en el equipo del jeltzale Markel Olano.