En rueda de prensa tras reunirse con su equipo económico, Rubalcaba consideró que el acuerdo entre empresarios y sindicatos es necesario «ya» y avanzó que se lo planteará directamente a los agentes sociales y también al Gobierno.

Tras mostrar su respaldo a las medidas anunciadas el domingo por la vicepresidenta económica para lograr el cumplimiento de los compromisos económicos que tiene el Estado español, se mostró seguro de que «se puede hacer algo más» e insistió en que es «enormemente importante» una concertación en la política de rentas.

«No se trata de ganar más, se trata de que salarios y beneficios se moderen al servicio de la creación de empleo, al servicio de la competitividad», recalcó.

Así, propuso revisar los acuerdos establecidos entre los agentes sociales para 2011 y 2012, firmados cuando la coyuntura económica era «drásticamente» diferente, para adecuarlos a la realidad actual.

Concretamente, el acuerdo salarial vigente contempla un aumento de entre el 1% y el 2% en 2011 y de entre el 1,5% y el 2,5% en 2012, con cláusula de revisión salarial a final del ciclo y cláusula de descuelgue (o de inaplicación) para las empresas que acrediten dificultades para hacer efectiva la subida salarial pactada.

A su juicio, la moderación salarial permitiría aumentar la competitividad de la economía y la moderación en los beneficios debería traducirse en reinvertir para generar empleo.

Esperanzado

Alfredo Pérez Rubalcaba reconoció en su comparecencia de ayer ante los medios de comunicación que no ha tenido tiempo para hablar con sindicatos y empresarios, aunque señaló que «unos y otros» conocen su preocupación por este tema, al haberla tratado durante su etapa al frente del Ministerio de Interior. «Creo que lo van a meditar y creo que se podrá abrir paso esta reflexión», añadió.

El candidato del PSOE dejó claro que formular propuestas como ésa está en su ámbito de responsabilidad, tanto desde su candidatura como desde el partido, para intentar que la salida de la crisis sea lo antes posible. Y dado que la crisis económica «no se va de vacaciones», indicó que «quienes tienen que estar al frente de las políticas para resolver esa crisis tampoco se pueden ir».

En referencia a la volatilidad en los mercados financieros, advirtió de que, pese a que ayer no fue el «lunes negro» que se preveía -la comparecencia tuvo lugar al mediodía- la inestabilidad no ha acabado.

Reiteró que el Estado español «tiene que hacer sus cosas»: cumplir los objetivos de déficit, completar la reestructuración del sistema financiero y poner en marcha medidas para traducir el crecimiento económico en empleo. Junto a ello, resaltó la importancia de que las comunidades autónomas sigan comprometidas con sus objetivos de déficit y que la regla de gasto se apruebe cuanto antes.