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BALONCESTO Promesas europeas

Jonas Valanciunas, vuelve un pívot «de los de verdad»

Alto, duro, rápido y gran defensor, el de Lietuvos Rytas ha guiado a Lituania al oro del Mundial sub 19 después de haber sido elegido por los Raptors en el último draft. Además, jugará el Eurobasket absoluto.

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Arnaitz GORRITI

Podríamos decir que Sabonis le hizo «mucho daño» al baloncesto. El «príncipe del Báltico» fue uno de los primeros jugadores grandes en ser capaz de salir de la «cueva» del poste bajo y machacar a sus rivales a base de triples. Otros muchos siguieron el ejemplo del «Zar», pero mientras que el de Kaunas tenía además un abanico de recursos casi inacabable, otros pívots han decidido quedarse en la raya de los 6,75 metros, contemplando la zona desde la lejanía.

Por eso quizás pueda sorprender que la última gran perla del baloncesto lituano, Jonas Valanciunas, sea un pívot «de los de toda la vida». A sus 19 años, el pívot de Utena maneja sus 2,10 metros y sus 105 kilos con casi sorprendente dureza. Valanciunas destaca porque siempre está ahí. Bloquea, tapona, rebotea, intimida y machaca.

Quizá no dé pases de fantasía -sabe pasar, pero en profesionales se le busca como «finalizador» más que como «creador» de juego- ni lanza triples -ni uno en 16 partidos de la pasada Euroliga-, pero es efectivo -otra vez en la Euroliga, logró 7,7 puntos con un 70,8% de efectividad en el tiro de dos y un 88,5% en los tiros libres-, pero no se descentra y cuando se le busca, se le encuentra.

Referente por antonomasia

Es fiable como uno de aquellos productos de fabricación soviética. Desde categoría cadete lidera a su selección llevándola sistemáticamente a la medalla de oro en los Eurobaskets sub 16 y sub 18 -el año pasado, en la final jugada en Vilnius ante Rusia, paliza para los locales por 90-61, y en el que Valanciunas fue el MVP tras lograr 31 puntos y 18 rebotes-, superando en estos torneos a otros grandes pívots coetáneos viejos conocidos como el turco Enes Kanter, el baskonista serbio Dejan Musli o el polaco Premyslav Karnowski. Para postre, lideró también el oro de su selección en el Mundial sub 19 disputado el pasado mes de julio en Letonia.

Aunque este último torneo empezara con mal pie con una derrota ante la Croacia de Saric y sufriera un nuevo tropezón en la segunda fase ante Estados Unidos -un duelo decidido tras dos prórrogas y donde Valanciunas firmaría 30 puntos y 15 rebotes-, a partir de los cuartos de final, el pívot de Lietuvos Rytas pondría las cosas en su sitio. 87-75 a Polonia en cuartos, con 26 puntos y 24 rebotes; 85-68 a Rusia -que eliminó a Estados Unidos- en semifinales, con 21 puntos y 13 rechaces, y 85-67 a Serbia en la final, con 36 tantos, 8 rebotes, 3 robos y 3 tapones. ¿Se imaginan a quién consideraron MVP de la final?

De Lituania a Toronto

Quizá cegado por el brillo dorado de su buena estrella, Jonas Valanciunas ha encontrado sitio en la selección absoluta que disputará el próximo Eurobasket. A la dureza habitual de gente como Javtokas o Petravicius, Valanciunas añade una agilidad sorprendente para un hombre de semejante tamaño. En uno de sus últimos partidos de preparación, el de Lietuvos Rytas ya dio un aviso sobre sus capacidades ante la España de los hermanos Gasol e Ibaka, logrando 10 puntos, a pesar de la derrota de los suyos por 90-78.

Muchos ojos estarán sobre él en el Eurobasket de Lituania, en parte por ser el ojito derecho del público local, y en parte porque tanto en Europa como en la NBA se preguntarán qué piensa hacer este mocetón. En el último draft de la NBA, Valanciunas fue elegido en quinta posición por los Toronto Raptors, franquicia que precisa de dureza en el interior, y que ya especula con elevar al lituano a la titularidad.

Sin embargo, aún está por ver si Valanciunas jugará en la NBA en la próxima campaña, o si algún otro equipo lo fichará o no. Lietuvos Rytas puso una cláusula de rescisión contractual por su mocetón de dos millones y medio de euros, una cifra que supera con creces los 500.000 euros que pueden, por ley, pagar las franquicias de la NBA; esto es, que o bien Lietuvos Rytas alcanza un acuerdo con Valanciunas o bien éste abona los dos millones restantes.

Desde luego, no parece que el pívot de Utena vaya a ir a ningún otro equipo europeo, por mucho que resulte un bocado más que interesante. Ya en su día, hace unos tres años, el Barcelona preguntó por él, pero a Lietuvos Rytas le faltó tiempo para renovarlo.

Valanciunas no es Sabonis, pero no parece que le haga falta.

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