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El profesorado navarro exige el fin de los recortes y lo quiere por escrito

Todos los sindicatos presentes en el profesorado navarro lanzaron un órdago al nuevo consejero de Educación, José Iribas, tras fracasar el encuentro de la semana pasada. Emplazan al Gobierno a una nueva negociación, pero le exigen que garantice que no habrá un solo recorte más, que les entregue los presupuestos para el año próximo por escrito y que las medidas adoptadas en junio sean solo «temporales».

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Aritz INTXUSTA | IRUÑEA

La unidad de acción entre el profesorado no universiario navarro sigue intacta. Todos los sindicatos mantienen el frente común en defensa de la educación pública y amenazan con un inicio de curso marcado por las movilizaciones de protesta si el Gobierno no da un paso atrás en los recortes y les garantiza que los presupuestos del próximo año no ahondarán en la «gravísima situación» de este pilar del estado del bienestar.

LAB, STEE-EILAS, Afapna, ELA, APS, ANPE, CCOO, CISF y UGT ofrecieron una rueda de prensa ayer en la que informaron de que el último encuentro con el nuevo consejero, José Iribas (UPN), no ha dado frutos. Los sindicatos del profesorado aprovecharon la comparecencia para lanzar públicamente su contraoferta a Iribas. Exigen que los últimos recortes, introducidos durante el mandato interino de Alberto Catalán, sean declarados como «temporales» y la recuperación a medio plazo del gasto presupuestario en Educación.

Los profesores señalaron que en los últimos tres años el Gobierno ha dado un tijeretazo al presupuesto educativo de 45 millones de euros. Frente a esta reducción del gasto, el número de alumnos se incrementó en un 9%. El primer punto de la propuesta del profesorado supone un compromiso serio, por escrito, de que esta línea no se va a mantener: «El Gobierno debe garantizar que no habrá nuevos recortes en Enseñanza Pública en los Presupuestos para 2012 y que se mantendrán las medidas de atención a la diversidad en proporción al incremento de las matrículas».

Además, remarcaron que el Gobierno miente. Las cifras que ofrece sobre reducción de la plantilla de profesores están amañadas. Mientras que el Gobierno señala que se han perdido poco más de cien plazas, los sindicatos calculan que los profesores que se han eliminado son más de 240. Los sindicatos explicaron que, o bien el gobierno no ha incluido las plazas de profesores que se jubilan (unos 120), o que la Consejería cuenta medias jornadas (y contratos de aún menos horas) como un puesto de trabajo más, adulterando de esta forma las cifras oficiales. A su juicio, lo que está realizando el Gobierno es un «ERE encubierto» a los profesionales de la educación pública.

Protestas e inicio de curso

A la espera de que el nuevo consejero -una de las apuestas de la presidenta, Yolanda Barcina, que viene de trabajar con ella en el Ayuntamiento de Iruñea-, responda a sus demandas, los sindicatos adelantaron cuáles van a ser sus vías principales de trabajo. Anuncian que retomarán los contactos con todas las fuerzas políticas del Parlamento y con el resto de agentes de la comunidad educativa (asociaciones de padres, directores de institutos, etc.). Avanzaron también que se concentrarán tres días en contra de los despidos frente a la sede de Educación.

Las protestas más importantes están aún por determinar. El profesorado las debatirá el próximo día 6 de setiembre en una gran asamblea, que coincide con el inicio de curso. A falta de conocer las decisiones específicas que se tomarán en dicho foro, los sindicatos avanzaron que su intención es organizar una gran campaña «en defensa de la educación pública».

El profesorado subrayó que «la pelota ahora está en el tejado del consejero» e instaron a Iribas a que tome una decisión con celeridad. El nivel de compromiso de los profesores para sacar adelante sus demandas quedó reflejado en las últimas protestas de finales del curso pasado, cuando Catalán destrozó las previsiones realizadas por los directores de los centros de secundaria cambiando los horarios y generando un caos en la asignación de plazas.

Iribas afirma que no tiene autoridad para dar marcha atrás

Los profesores valoraron como infructífera la reunión con el nuevo consejero. Indicaron que se mostró correcto y adulador, asegurando que está dispuesto a buscar un acuerdo. Iribas leyó en la reunión un extenso texto cargado de piropos y buenas intenciones, pero a la hora de la verdad no accedió a negociar nada. En el comunicado de ayer, los representantes del profesorado rescataron algunas frases de ese discurso leído para dar una idea del tono de la reunión. Así, destacan que Iribas aseguró que está dispuesto a «apostar por el diálogo en una situación compleja» y que su intención es «luchar por una recuperación del gasto público en Educación».

Sin embargo, los sindicatos llegaban a la reunión con propuestas concretas. La primera fue que echase para atrás los recortes impuestos por el anterior consejero interino a finales del curso pasado. Iribas afirmó ser incapaz, asumiendo plenamente la reducción. Tampoco se mostró dialogante cuando le solicitaron que acabara con los contratos inferiores a media jornada, lo que resultó muy frustrante para los docentes.

Al término de la reunión, Iribas señaló que los ejes fundamentales de la política restrictiva heredada de Catalán (recogidos en el Capítulo 1 de la nueva normativa) son innegociables. En consecuencia, los nueve sindicatos le emplazaron a que, por lo menos, vuelva a sentarse a la mesa con ellos a la mayor brevedad para negociar todos los aspectos que no estén incluidos en el Capítulo 1. Los profesores tomarán unas determinaciones u otras en función de ese encuentro. A.I.

bloquean el debate

UPN y PSN tumbaron ayer en la Junta de Portavoces la iniciativa respaldada por NaBai, Bildu e I-E para que el Parlamento solicite anular los recortes en educación. El Partido Popular prefirió lavarse las manos y se abstuvo.

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