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Un triple ataque coordinado golpea al Ejército israelí en la frontera del Sinaí

Un triple ataque sincronizado golpeó ayer al Ejército israelí en las carreteras que conducen a la localidad de Eilat, en el sur de Israel, cerca de las fronteras con la península egipcia del Sinaí y con Jordania, y dejó un saldo de siete israelíes y siete supuestos atacantes muertos. Israel, que lo consideró un atentado a su soberanía, apuntó inmediatamente a la Franja de Gaza, desde donde Hamas negó estar involucrado en los ataques.

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GARA | TEL AVIV

Catorce personas, siete israelíes -al menos dos de ellas soldados- y siete supuestos atacantes, murieron ayer en un triple ataque coordinado contra un autobús y un vehículo militar y en tiroteo posterior así como contra un turismo particular cerca de la estación balnearia israelí de Eilat, fronteriza con el Sinaí egipcio y con Jordania.

El objetivo del primer ataque fue un autobús de la compañía pública Egged y tuvo lugar a mediodía (11, hora de Euskal Herria), cerca de la frontera egipcia, a poca distancia del puesto israelí de Netafim. Según dijo a AFP un portavoz de la compañía, el autobús circulaba entre Beersheva y Eilat, cerca de la frontera con el Sinaí, y llevaba a bordo a decenas de militares que viajaban a este balneario para pasar el fin de semana, que en Israel comienza hoy. El autobús fue ametrallado y se produjeron nueve heridos, cinco de gravedad.

Esa y otras rutas de autobuses públicos en el sur están llenas de soldados los fines de semana, ya que cientos de ellos que realizan el servicio militar en bases del desierto del Negev utilizan ese medio para volver a sus casas.

Media hora después, un vehículo militar que venía en su ayuda fue atacado con un artefacto teledirigido y murieron dos soldados.

En el tiroteo entablado durante la persecución de los atacantes fallecieron siete de ellos, según fuentes militares israelíes.

El ataque más grave, en el que murieron cinco israelíes, tuvo lugar tuvo lugar cuatro horas después, cuando un vehículo privado recibió el impacto de un cohete antitanque RPG cerca de Beer Ora, a quince kilómetros de Eilat, esta vez cerca de la frontera jordana.

Un portavoz de Magen David Adom (equivalente local a la Cruz Roja) no pudo precisar si se trató de soldados o civiles, pero medios israelíes dijeron que dos de las víctimas eran niños.

Pero el corresponsal de TeleSur en la zona, señaló que el portavoz del Ejército israelí informó de la muerte de seis soldados.

Desde Gaza por Egipto

Israel afirmó que esos ataques, cuidadosamente coordinados, fueron llevados a cabo desde Gaza por combatientes palestinos que se habrían infiltrado por la península egipcia del Sinaí, aprovechando la inestable situación en Egipto desde el inicio de la revuelta que acabó con la renuncia de Hosni Mubarak, aliado de Tel Aviv.

El Gobierno de Benjamin Netanyahu expresó desde la caída del rais su preocupación por la situación en el país y cómo podría afectar a Israel. Aunque el nuevo régimen no ha realizado todavía reformas efectivas que hayan supuesto un cambio en las relaciones entre ambos países, lo sucedido ayer ha encendido todas las alarmas en Israel.

La hipótesis que barajan los responsables israelíes es que los autores procedían de la Franja de Gaza y se infiltraron en territorio israelí a través de Egipto.

Así lo manifestó el ministro israelí de Defensa, Ehud Barak, quien afirmó en un comunicado que «se trata de un grave ataque terrorista coordinado, que muestra el debilitamiento del control de Egipto en la península del Sinaí y de las acciones terroristas que se están extendiendo».

Ninguna organización se atribuyó la autoría de los atentados, pero Barak aseguró que «la fuente de los actos terroristas es Gaza y actuaremos contra ellos con toda nuestra energía».

Por su parte, Benjamin Netanyahu insistió en que el triple ataque constituye un «atentado contra la soberanía del Estado» de Israel, que responderá «en consecuencia» haciendo pagar «un precio muy alto» a quienes atacan a Israel.

Ante las acusaciones de Israel, Hamas, que controla la Franja de Gaza, negó cualquier relación con los ataques, aunque uno de sus líderes, Ahmad Yusef, los alabó porque el objetivo era soldados israelíes. En previsión de una posible represalia israelí, como ocurrió poco después, el Ministerio gazatí de Interior ordenó a su personal evacuar todas las dependencias oficiales, los cuarteles y las comandancias.

El portavoz de Netanyahu, Mark Regev, insistió en que las autoridades poseían «información concreta» de que los autores de los ataques procedían de Gaza. «Dejaron Gaza para ir hacia el sur en el Sinaí, se quedaron ahí un tiempo, luego subieron hacia el norte para entrar en Israel. Ya hemos visto antes esa manera de actuar», afirmó.

Pero desde Egipto, el gobernador de la provincia del Norte-Sinaí, Abdel Wahal Mabruk, afirmó que los asaltantes no llega- ron al territorio egipcio y descartó que se hubieran infiltrado por un túnel desde Gaza, destacando que hay establecidas estrictas medidas de seguridad a causa de una operación militar egipcia en curso desde hace unos días en el Sinaí contra un grupo armado sospechoso de haber hecho explotar el gasoducto que provee a Israel y de haber atacado un puesto de Policía.

La ONU, EEUU y los países de la UE condenaron lo sucedido.

Israel bombardea Rafah y mata a seis personas

Los bombardeos de la Fuerza Aérea israelí contra la Franja de Gaza, ocurridos después del triple en represalia por el triple ataque de Israel, dejó un balance de seis palestinos muertos, entre ellos un comandante de los Comités Populares de Resistencia, identificado como Kamal al-Nairab, según Reuters, y un niño de nueve años. Los otros cuatro muertos eran también combatientes de la misma organización armada.

El primer ministro israelí, Benhamin Netanyahu, afirmó que su principio es responder «de inmediato y con dureza», como, según dijo, se hizo ayer en Rafah. «Los que ordenaron matar a nuestra gente, ya no están vivos», aseguró en referencia a ese ataque aéreo.

Según fuentes de los servicios de emergencia de Gaza, los aviones israelíes atacaron la vivienda de un miliciano identificado como Abu Jamil Shaat, donde al parecer había varios miembros de los Comités Populares de Resistencia.

Una fuente militar israelí, por su parte, confirmó un bombardeo en Rafah, donde previamente fuentes palestinas había informado de dos personas muertas tras una explosión en una vivienda de la zona. GARA

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