La tregua tácita entre las milicias palestinas en Gaza e Israel continúa siendo frágil tras la muerte ayer de un combatiente de la Yihad Islámica en un ataque israelí, al que las Brigadas al-Quds respondieron con el lanzamiento de varios cohetes. Otro bombardeo israelí mató a Mohamed Moqat, de 20 años, y, además, ayer fue hallado el cuerpo descuartizado a un hombre de 65 años, Ismael Amoum, en una zona atacada por el Ejército israelí junto al campamento de refugiados de Deir al-Balah.

Las Brigadas al-Quds, brazo armado de la Yihad Islámica, confirmaron la muerte de Ismail al-Asmar, de 37 años, cuando las fuerzas sionistas lanzaron un misil tierra-aire contra el vehículo en el que viajaba junto con otra personas, que resultó herida. El Ejército israelí acusó al fallecido de estar involucrado «en el contrabando de armas» y de tener la intención de «ejecutar acciones terroristas en el Sinaí».

Ayer por la mañana las milicias palestinas dispararon varios proyectiles que impactaron en el distrito de Eshkol, en el sur de Israel, sin causar heridos, en lo que podría ser una renovación de la escalda de violencia.

Las Brigadas al-Quds reivindicaron en un comunicado el lanzamiento de seis cohetes contra el puesto de control de Kissufim, en Eshkol, tras la muerte durante la madrugada de Al-Asmar.

La aviación israelí atacó de inmediato la Franja de Gaza, asegurando que el objetivo eran dos de los autores de esos lanzamientos, en el norte del territorio palestino, y dijo haber herido a dos combatientes de la Yihad, extremo que confirmaron fuentes palestinas.

Un cohete impactó en territorio egipcio, cerca de Rafah, e hirió a una mujer.

En un comunicado, el Gobierno de Hamas en Gaza criticó «la violación de la calma» por parte de Israel, al que acusó de provocar esta nueva escalada.

La frágil tregua, a la que se unió la Yihad Islámica pero no los Comités Populares de Resistencia, fue anunciada el lunes por Hamas, después de varios días de bombardeos israelíes y lanzamiento de cohetes palestinos.

Los grupos armados palestinos condicionaron el alto el fuego xa que Israel también detuviera sus ataques, pero Tel Aviv subrayó el carácter unilateral de la tregua palestina y dejó claro que seguirá actuando contra quien lance proyectiles.

Un alto cargo israelí entrevistado ayer por la radio del Ejército, subrayó que «la respuesta excesiva de Israel en Gaza podría tener consecuencias para toda la región».