El Gobierno de Nafarroa anunció ayer que ahorrará en torno a 2,15 millones de euros al suprimir el 8,24% de los mandos intermedios de la Administración, según señaló ayer su portavoz, Juan Luis Sánchez de Muniáin, tras la reunión del Ejecutivo, que se celebró por primera vez en miércoles.

Según los datos del Gobierno, se han eliminado 44 unidades de gestión: catorce servicios, 25 secciones y otros cinco mandos intermedios en Osasunbidea y Hacienda. Con ello, el número de jefaturas suma 490 unidades, frente a las 534 de la legislatura anterior.

Esta decisión del Gobierno de Yolanda Barcina se produce después de que el parlamentario de Bildu Bittor Rubio presentase una pregunta en la Cámara sobre el «paulatino aumento de jefes en las administraciones públicas de la mano de UPN».

El parlamentario abertzale quería saber «si a día de hoy sigue existiendo un importante número de jefaturas sin nadie a su cargo y a qué departamento corresponden» y atribuía estas circunstancia a «la visión cortijera con la que UPN actúa en las instituciones, creando jefaturas en pago a determinadas afinidades».

Sánchez de Muniáin, por su parte, añadió que el Gobierno eliminó en julio el 23,7% de los altos cargos y puestos de confianza, lo que supone un ahorro estimado de 888.239 euros.

«La reducción no es igual en todos los departamentos debido al diferente peso de cada uno de ellos, pero todos han hecho un esfuerzo para ahorrar costes», indicó el portavoz.

Sánchez de Muniáin subrayó que la reducción de jefaturas «responde a los principios de eficacia, austeridad y ahorro asumidos por el Gobierno de Navarra con el objetivo de ofrecer los mismos servicios a los ciudadanos a un menor coste».

Junto a ello, Sánchez de Muniáin indicó que el dinero que se ahorrará con esta medida se destinará al «mantenimiento y mejora de los servicios básicos y la generación de riqueza y empleo», que calificó como «objetivos prioritarios del Gobierno de Navarra».

Revisar las cesantías

Sánchez de Muniáin, por otra parte, abogó por adecuar la normativa vigente sobre cesantías para «adecuarla a las circunstancias económicas actuales».

Estas palabras se pronunciaron después de que se conociera que cuatro consejeros del Gobierno de Miguel Sanz cobrarán el 80% de su sueldo tras dejar el cargo, a pesar de que también son parlamentarios del grupo de UPN y que, por tanto, les corresponde un sueldo de la Cámara navarra.

Asimismo, la presidente del Gobierno, Yolanda Barcina, se dio de alta en la UPNA para cobrar de la institución académica los 19 días que transcurrieron desde que dejó de ser alcaldesa de Iruñea hasta que fue nombrada máxima responsable del Ejecutivo navarro.

Sánchez de Muniáin subrayó, en este sentido, que la ley vigente actualmente se aprobó por unanimidad de todos los grupos presentes en el Parlamento navarro «puesto que respondía a otro momentos económico, pero lógicamente ahora se tiene que producir un ajuste en la normativa por necesidades económicas».