La izquierda abertzale reclama pasos «urgentes» al Estado para avanzar
Más de 2.000 personas denunciaron ayer las imposiciones del Estado español en una manifestación en Bilbo. Desde allí, la izquierda abertzale interpeló al Estado español para que acometa ya la legalización de Sortu y ponga fin a la actual política de dispersión. Niko Moreno prometió que por su parte la izquierda abertzale «está dispuesta a darlo todo» con el fin de que el proceso que ha abierto siga avanzando.
Ion SALGADO | BILBO
La izquierda abertzale aprovechó el día grande de la Aste Nagusia bilbaína para realizar una interpelación al Estado español. Lo hizo recordando que el avance en el proceso de normalización política y democrática está pendiente de dos pasos que considera «urgentes»: la legalización de Sortu y el cese de la política penitenciaria aplicada a los presos políticos vascos.
El ex alcalde de Elorrio Niko Moreno se encargó de enunciar las dos demandas. El representante independentista tomó la palabra al término de una manifestación en la que se denunció la imposición a la que es sometida Euskal Herria por parte del Estado español. Una cita que congregó a más de dos mil personas en la plaza Moyua.
En su discurso, Moreno reconoció que el pueblo vasco está viviendo una situación «histórica», donde es posible materializar un cambio político y social. «Una nueva etapa se ha abierto en Euskal Herria, llena de ilusiones y oportunidades», añadió. Antes, Moreno recordó a lo presentes que esta nueva fase es fruto «de la entrega de todas las personas que a lo largo de duros años de lucha han trabajado mano a mano, con coherencia y honestidad». Un trabajo que dijo que ha derivado en la apertura de una opción sólida de alcanzar la paz y la democracia.
Ante esta realidad, expuso que la izquierda abertzale está dispuesta «a darlo todo» para que el proceso de resolución del conflicto «avance y se afiance». Para ello, las personas que conforman la izquierda independentista van a invertir todo su «capital político y humano», con el fin de construir un marco democrático que reconozca a Euskal Herria y su derecho a decidir como sujeto político.
Remarcó que la apertura del nuevo escenario no cambia un ápice los ideales y objetivos de la izquierda abertzale, que continúa trabajando con la misma perspectiva de fondo: construir un Estado vasco, independiente y socialista. Pero en ese camino existen otros retos urgentes, como la legalización del nuevo partido Sortu. Y también las elecciones estatales del 20 de noviembre, donde la izquierda abertzale ofrece junto a EA y Alternativa conformar una alianza en favor del derecho a decidir.
Rechazo del PNV
De modo reiterado, el PNV ha mostrado su rechazo a una posible coalición de cara a las elecciones estatales. Esta postura fue criticada por Moreno, que pidió a los jeltzales que dejen de poner «vagas excusas. Que respondan de una vez a esta simple pregunta: ¿Por qué no acumular fuerzas en defensa del derecho a decidir?».
La respuesta oficial a la pregunta formulada por la izquierda abertzale todavía está por llegar, ya que ni siquiera ha habido una reunión. Hasta la fecha sí se han escuchado las opiniones de diferentes dirigentes jelkides en contra de esta opción de suma de fuerzas. Con Aralar sí hubo ayer un nuevo contacto [ver página 13].
En cuanto a las dos formaciones españolas más importantes, PSOE y PP, el representante abertzale les solicitó un cambio de actitud. En su discurso, Moreno les pidió que dejen a un lado su postura «inmovilista» y que adquieran una «actitud constructiva» con el nuevo escenario político.
Niko Moreno les hizo ver que la ciudadanía pide compromisos y reclama otro futuro. Por ello, realizó un llamamiento a las dos formaciones españolas para que «dejen de condicionar y de bloquear el proceso de soluciones».
Asimismo, Moreno se refirió expresamente a la actitud mostrada por el lehendakari, Patxi López, y por su consejero de Interior, Rodolfo Ares, a quienes instó a «abandonar la realidad virtual en la que están instalados, para aterrizar de una vez en la realidad política y social» de Euskal Herria.
A este respecto, el ex alcalde de Elorrio pidió el fin de la actual estrategia del Gobierno de Lakua, al que achacó la responsabilidad una «dinámica represiva» que castiga a comparsas como Kaskagorri y Txori Barrote, prohibidas en el Arenal pero presentes en la plaza Moyua. Un lugar al que llegaron portando una gran ikurriña y acompañados por más de dos mil personas que reclamaron una Euskal Herria «sin ningún tipo de violencia, sin amenazas, sin presiones y sin torturas».
Durante su intervención, Moreno realizó una mención especial en recuerdo de Santi Brouard y Josu Muguruza, dos representantes del la izquierda abertzale muertos en acciones de guerra sucia.