La última coreografía de Pina Bausch recuperada en «Dancing Dreams»
M. I. | DONOSTIA
Si este año Wim Wenders presentaba en la Berlinale su documental sobre la bailarina y coreógrafa Pina Bausch, titulado simplemente «Pina», en la anterior edición pudo verse otro trabajo del mismo género realizado por la periodista Anne Linsel y el director de fotografía Rainer Hoffman. La pretensión de Wenders ha sido la de abarcar toda la obra de la artista, mientras que «Dancing Dreams» se centra en el último espectáculo que llegó a montar antes de su muerte hace dos veranos.
En «Pina» aparece entre sus coreografías más famosas la que hizo en 1978 con el nombre de «Kontakthof». Pues bien, «Dancig Dreams» muestra la nueva versión estrenada en noviembre de 2008, justo treinta años después. El mayor cambio consiste en que Pina Bausch no quiso contar con bailarines profesionales, prefiriendo experimentar con jóvenes de entre 14 y 18 años que nunca antes habían bailado en un escenario.
El documental resume los diez largos meses de ensayos para preparar a los debutantes, hasta convencerles de sus posibilidades dentro de la expresión corporal. Asimismo, contiene la última entrevista con Pina Bausch.