Una amplia representación de vecinos de Leitza denunció ayer al proceso al alcalde, Oier Eizmendi, y a las otras dos personas imputadas por la Fiscalía de la Audiencia Nacional tras un informe de la Policía Foral sobre la denuncia de la política carcelaria durante el chupinazo de fiestas.

Entre los firmantes aparecen el harrijasotzaile Iñaki Perurena, los pelotaris Abel Barriola, Asier Olaizola y Oinatz Bengoetxea, el escritor Patziku Perurena, el profesor Mikel Ilarregi o el músico de Esne Beltza Aitor Zabaleta, así como numerosos colectivos de Leitza de todo tipo.

En un comunicado conjunto, denuncian que con la criminalización de la solidaridad hacia los presos «la imagen del pueblo de Leitza ha sido completamente manipulada, mezclando y tergiversando lo que ocurrió ese día en la plaza y en el Ayuntamiento, como si aquí se hubiera producido una gran guerra y como si en este pueblo fuera imposible la convivencia».

Moción aprobada

Frente a todo ello, las personas reunidas en esta iniciativa subrayan que lo cierto es lo contrario: que «estas fiestas han sido tranquilas como ninguna, sin incidente alguno».

Todos estos vecinos afirman que «seguiremos trabajando por Leitza también en lo sucesivo, y ofrecemos nuestro apoyo y amparo a las tres personas que han sido imputadas en este proceso inventado». Y llaman al vecindario de Leitza a responder «unidos» a esta agresión.

También ayer, un Pleno extraordinario aprobó una moción que denuncia la «campaña mediático-política» y cita otros años antecedentes similares a ese caso en Leitza sólo en los últimos dos años.