Etxeberria prevé un «choque de trenes político» y Rubalcaba confía en el PNV
Rufi Etxeberria, representante de la izquierda abertzale, y Alfredo Pérez Rubalcaba, candidato del PSOE, expusieron ayer sus criterios sobre el futuro en dos entrevistas de prensa. Etxeberria auguró que si el Estado no admite los derechos de Euskal Herria habrá «un auténtico choque de trenes político». Rubalcaba lo asume, pero confía en la actual dirección del PNV y se muestra más preocupado por Catalunya. Uno y otro ven necesario que el PP se implique.
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En un nuevo escenario político como el que se vive en Euskal Herria y con los comicios del 20 de noviembre en el horizonte cercano, Rufi Etxeberria expuso la posición de la izquierda abertzale ayer en ``El Diario Vasco'', y Alfredo Pérez Rubalcaba hizo otro tanto con la del PSOE en ``El País''. El terreno de juego que uno y otro prevé es similar según sus respuestas; por ejemplo, ambos dan por bueno que ahora llegará un fuerte enfrentamiento político.
En concreto, Rufi Etxeberria indica que «tanto el PP como el PSOE o Rubalcaba deben reconocer los derechos nacionales de Euskal Herria, porque si no auguramos un auténtico choque de trenes político entre el sujeto vasco, catalán o gallego y Madrid. Y la voluntad mayoritaria estará obligada a adoptar decisiones unilaterales de soberanía», advierte.
Rubalcaba ya lleva meses indicando que asume esta lucha política con el independentismo. A preguntas de ``El País'' sobre si «le preocupa la deriva de los nacionalismos vasco y catalán», el candidato del PSOE respondía ayer que «no tanto en el País Vasco, donde creo que el liderazgo de Iñigo Urkullu recuerda más al de Josu Jon Imaz que al de Ibarretxe. Donde ha aparecido algún problema más es en Catalunya -añade-. No podemos desconocer que en Catalunya existe un desapego hacia el resto de España».
El que ya es de facto máximo dirigente del PSOE asume en la entrevista la tesis de Jesús Eguiguren de que «estamos en el final de ETA», pero que no necesariamente habrá una declaración en este sentido. Por el momento, insiste en que hay que «ser mucho más exigentes con Bildu: `ahora que estáis dentro [de la ley], resulta totalmente intolerable que mantengáis un vínculo, el que sea, aunque sea muy tenue, con la banda terrorista. Y, sobre todo, que no hagáis aquello que tenéis que hacer, que es pedirles que se vayan'», espeta a la coalición.
Por su parte, Rufi Etxeberria remarca que «no tenemos ninguna duda de que ETA ha tomado la decisión de dejarlo», pero recuerda que «los procesos no se construyen de forma unilateral, sino bilateral o multilateral», y que el Estado no ha dado siquiera el paso de verificar «para que dé confianza sobre la declaración del alto el fuego».
En referencia a si José Luis Rodríguez Zapatero todavía podría hacer algo, Etxeberria valora que «la situación actual ofrece mayores garantías que en 2006. Empezó con una decisión valiente de retirar las tropas de Irak y podría acabar igual dejando un legado histórico de iniciar un proceso para la solución del conflicto vasco».
El papel del PP
Interesantes resultan también sus valoraciones sobre el PP. Así, Rubalcaba deja claro que «honestamente no creo» que vaya a cambiar de estrategia respecto al PSOE: «Creo que esto se va a gestionar bien. No creo que el final de ETA dependa de quién gobierne».
En cuanto a Rufi Etxeberria, indica que «el PP tiene que ser parte de la solución. En este sentido, queremos entablar relación con el PP para compartir análisis y desarrollar trabajos conjuntos. La izquierda abertzale cree que es inaplazable abrir dinámicas de relación».
El portavoz de la Ejecutiva del PSE, José Antonio Pastor, respondió ayer de modo crispado a una de las afirmaciones de Rufi Etxeberria en ``El Diario Vasco'': la de que en el futuro «el Estado, ETA y nosotros deberemos reconocer el daño generado». Por contra, para Pastor es «insultante y una absoluta estupidez» que desde la izquierda abertzale se pida al Estado reconocer el daño causado «cuando aquí hay sólo una violencia asesina, que es la de ETA». Asimismo, incidió en que «hasta que ETA desaparezca y la izquierda abertzale no haya manifestado rotundamente su petición de desaparición, no hay nada más que hacer».
En declaraciones a Europa Press, Pastor dijo rechazar «absolutamente» la consideración de que un proceso de solución de este tipo es necesariamente bilateral o multilateral. «El único movimiento lo tienen que hacer ETA y la propia izquierda abertzale. Me da la impresión de que aunque parezca que el lenguaje cambia algo siguen anclados en las mismas posiciones. No pasan del voluntarismo».
Sobre el reconocimiento del daño, para Pastor «no se puede intentar comparar y equiparar la actuación del Estado de Derecho y la Policía para defender la democracia con la actuación de unos asesinos». Según su tesis, el Estado no tiene que pedir perdón por nada, y en todo caso «el Parlamento Vasco, en la ponencia de víctimas del terrorismo ya hablaba de las víctimas de ETA, del GAL y del Batallón Vasco-Español».
