SEGUNDA B | Amorebieta
El pueblo teņido de azul
Zornotza disfruta con los mejores años del Amorebieta, en Segunda B por primera vez en su historia.
Amaia U. LASAGABASTER
«Aquí se ven más camisetas del Amorebieta que del Athletic. Eso no pasa en ningún otro sitio», proclama orgulloso el presidente del Amorebieta, orgulloso de vivir uno de los momentos más dulces en los 86 años de vida del club vizcaino que, por primera vez en su historia, compite en Segunda B. Todo un éxito para el que Joseba Barrenetxea reconoce imprescindible la aportación de sus paisanos, aunque tampoco entendería el municipio sin la aportación del club que preside desde hace una década.
En lo que se refiere al apoyo de los zornotzarras, los datos no dejan lugar a dudas. Tras el ascenso, el número de socios ronda los 1.400, lo que supone el 8% de la población. Y la asistencia a Urritxe en estas primeras jornadas duplica la media de la temporada pasada. «Ya llegará el invierno. Y vendrá la Arandina -reconoce Barrenetxea-. Pero ahora mismo estamos encantados. Yo me fijo en partidos de Segunda A con 2.500 ó 3.000 personas y nosotros hemos tenido 1.600 contra el Salamanca, 1.900 en Copa, 1.300 el pasado domingo... Gente que antes no veías nunca, ahora está en Urritxe», se felicita el presidente de los azules, que también intenta poner sus medios para que los números sigan sonriendo. «Hemos intentado no tocar los abonos porque preferimos mantener ese criterio de que aparezca mucha gente y se hagan muchos socios. Seguramente serán las cuotas más bajas de toda la categoría poque el carnet más caro es de 105 euros».
Medio millón
Y eso que no es precisamente el dinero lo que sobra en el Amorebieta, que cuenta con uno de los presupuestos más bajos de Segunda B, pese a haberlo incrementado en un 40% respecto a la temporada pasada. En lo que se refiere a los gastos, el salto es evidente, con desplazamientos más largos o el cupo mínimo de seis contratos profesionales en la plantilla -Ander Alaña tiene el honor de haber firmado el primero en toda la historia del club-. En el capítulo de ingresos, la cuestión es más complicada. «Siempre hay alguno más que en Tercera. Está el tema de Euskal Telebista, algo que aporta la Diputación de Bizkaia..., aunque siempre te quedas cojo. Pese a que estamos viviendo los mejores años del Amorebieta, curiosamente están coincidiendo con esta situación de crisis, con lo que no es el mejor momento para pedir dinero a nadie. Así que tenemos que pelearlo bien, mirando mucho los gastos y trabajando como las hormiguitas para conseguir más ingresos, haciendo nuevos socios, buscando nuevos patrocinadores...». Granito a granito hasta alcanzar los aproximadamente 500.000 euros de presupuesto.
Pero no sólo hay que hacer virguerías para conseguir ese medio millón. También para repartirlo porque, además de la primera plantilla, debe mantener una estructura con 22 equipos de categorías inferiores, uno de los motivos de orgullo de los rectores del club. «Implica mucho trabajo, pero también supone una gran satisfacción», asegura Joseba Barrenetxea, que siempre trata de que cinco o seis jugadores del primer equipo ejerzan de entrenadores en categorías inferiores. «Es una manera de motivar a los chavales, de implicarles con el club. Y además revierte en cierta manera porque esos chavales luego vienen a Urritxe, en muchos casos con sus padres, y se nota en el ambiente».
La fórmula debe convencer porque son nada menos que 330 chavales los que visten la camiseta azul en categorías inferiores, «también una proporción muy alta respecto a los habitantes», recalca Barrenetxea, y que hace que las instalaciones de Txolon «se estén quedando muy pequeñas. En su día había un proyecto de hacer dos campos de fútbol, pero estamos sólo con uno y no da más de sí».
Cita internacional
Txolon es también escenario de una de las joyas de la corona del club zornotzarra, la Amorebieta Etxano-Cup, un torneo internacional de categoría benjamín que el próximo mes de diciembre alcanzará su décima edición. «Vienen los mejores equipos alemanes, holandeses, ingleses, italianos... Además de Barcelona, Real Madrid... O Athletic, Real y Osasuna que vienen siempre, además del Amorebieta, claro. Supone muchísimo trabajo, no sólo nuestro, sino de todos los socios y de todo el municipio, que al final es el que está apoyando para que se puedan hacer todas estas cosas, pero la satisfacción que nos da merece la pena. Es otra manera de que Zornotza esté bien representada y tenga un buen nombre, que también es lo que intentamos con el primer equipo».
Goleadores. Sendoa se está erigiendo como el salvavidas del Alavés en estas primeras jornadas. Da goles a sus compañeros y también los marca. Con el que anotó frente al Eibar ya son tres y encabeza la tabla de artilleros del grupo, empatado con Joaquí (Arandina) y el pitxitxi del pasado año Diego Cervero (Logroñés).
Tropiezo. El Mirandés, que contaba sus partidos por victorias, sufrió su primer tropiezo. Fue en Urritxe, donde el Amorebieta se sacó la espinita copera. Pese al empate, los hombres de Carlos Pouso se mantienen al frente de la tabla y son el único equipo que aún no ha encajado un solo gol.
Maleficio. Lo del Alavés con el balón parado empieza a parecer una cuestión paranormal. Seis tantos le han marcado a Rangel y todos ellos han llegado en acciones de estrategia. A los albiazules les queda el consuelo de ser los más goleadores.
Espera. Javier González Etxebarria sigue sin poder contar con Ngako. El camerunés, en quien tienen depositadas muchas esperanzas en Lemona, no ha resuelto aún los problemas administrativos que le impiden jugar.
Reivindicación. Ibai Gómez, con el que de momento no cuenta Marcelo Bielsa, se convirtió en uno de los protagonistas de la victoria rojiblanca frente al Burgos. Anotó por partida doble, incluyendo un gol olímpico. No fue el único doblete: también marcaron dos el realista Iñigo Rodríguez en Guijuelo y el navarro Iñaki Muñoz con el Logroñés frente al Sestao River.
Baja. Félix Sarriugarte no podrá contar con Igor Cuesta en Ponferrada tras haber sido expulsado. Por idéntico motivo, José Ángel Ziganda pierde a Saborit para el choque de Salamanca aunque, a cambio, recupera a Bustinza.
Promesa. A Aridane le toca cambiar de look. Según explicó en Twitter Pablo Gallardo -que pasará esta semana por el quirófano y al que Sendoa dedicó su gol-, el canario, que anotó el segundo gol albiazul frente al Eibar, «prometió pelarse cuando marcara. Se acabaron esos pelos!».
Ya lo advertía Joseba Barrenetxea en agosto. «Somos un club modesto y recién ascendido, pero no vamos a ser la cenicienta». De momento, los hechos le dan la razón: con cuatro jornadas disputadas, el Amorebieta está en puntos de play-off.
Y eso que tiene uno de sus principales enemigos en casa. «Ya era de los peores en Tercera y probablemente ahora mismo Urritxe es el peor campo de Segunda B», lamenta Barrenetxea que, a cambio, cuenta con un equipo que le tiene encantado. Empezando por su entrenador, Axier Intxaurraga. «No tiene experiencia en la categoría, pero estoy seguro de que apunta alto. Es muy inteligente, y la sobriedad con la que vive el fútbol y la manera en que hace grupo...». Ésa es la otra clave del éxito, el grupo. «Mantenemos la columna vertebral del año pasado y hemos fichado una serie de jugadores con experiencia en Segunda B, en los que hemos mirado el aspecto futbolístico, pero sobre todo el personal para ver cómo pueden encajar y hacer un mejor equipo». El resultado es un conjunto que tendrá que «pelear cada punto pero que también resultará muy difícil para todos los rivales». A.U.L.
El Amorebieta cuenta con una tienda oficial desde el año pasado, algo inaudito en Tercera e incluso en Segunda B. Quizá por eso en Zornotza «se ven más camisetas azules que del Athletic», se enorgullece su presidente.