La filtración de una cinta de audio ha revelado contactos, a finales de 2009 o principios de 2010 en Oslo, entre el actual jefe del servicio turco de Inteligencia (MIT), Hakan Fidan, y el entonces «número dos» del servicio, Afet Gunes, con altos dirigentes del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), según la prensa local.

Los medios de comunicación habían dado por sentado que existían conversaciones oficiales con el PKK, pero la aparición de esa grabación constituye la primera prueba de ello.

La cinta grabada durante una reunión de delegados de ambas partes, moderada aparentemente por un funcionario británico, fue conectada a varias web y el texto de las conversaciones fue publicado por en dos agencias de noticias afines al PKK.

No obstante, esas páginas retiraron más tarde el texto y dijeron que había sido introducido por algunos piratas informáticos anónimos, informó Efe.

Toda la prensa turca se hizo ayer eco de las supuestas revelaciones sobre los esfuerzos para alcanzar un acuerdo entre las autoridades del país y la organización armada kurda considerada «terrorista» no sólo por Turquía, sino también por la Unión Europea (UE) y EEUU.

Y es que la publicación en la red de las citadas conversaciones se produce cuando el PKK ha reanudado sus ataques a las fuerzas de seguridad turcas y se especula con que Turquía planea una incursión militar terrestre en el norte de Irak, donde los rebeldes tienen sus bases.

Se desconoce quién es el moderador británico que interviene en las conversaciones, que se supone son parte de la quinta ronda entre delegados del Estado y del PKK y también quién o quiénes han filtrado a la red electrónica la grabación.

De parte del PKK, en las conversaciones participaron, como líderes del grupo en Europa, Sabri Ok, Zubeyr Aydar y Mustafa Karasu, mientras que el Estado turco estuvo representado por Gunes y Fidan, que entonces era subsecretario alterno del primer ministro, Recep Tayyip Erdogan.

Se supone que ambas partes intentaron establecer una «hoja de ruta» para solucionar el conflicto armado, un plan lanzado desde la cárcel por el líder del PKK, Abdullah Ocalan.

«La situación es muy grave», dijo el líder del Partido Republicano del Pueblo (CHP), Kemal Kilizdaroglu. «Si los representantes de los servicios de Inteligencia, cuyo trabajo es mantener los secretos del Estado, están siendo grabados, nos muestra cómo va el país. No es una persona cualquiera, es el jefe de la Inteligencia del país», declaró.