La Delegación del Gobierno español en Ceuta acordó ayer aumentar las medidas de seguridad en el interior del Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes después de una revuelta que se saldó con cuatro heridos, entre ellos tres vigilantes, y un detenido.

Según la versión policial, el suceso se produjo a última hora de la noche del martes durante el cierre del turno de comedor, cuando un subsahariano llegó tarde para la cena y se le prohibió el acceso. Comenzó una discusión que derivó en un enfrentamiento entre inmigrantes.

Los vigilantes de seguridad pidieron la presencia de la Policía Nacional y 50 agentes de este cuerpo y Guardia Civil se desplegaron en el interior del recinto, donde viven más de 700 personas.