Askatasuna denunció ayer el hallazgo en el coche de la urruñarra Laurence Marinea de un dispositivo de espionaje. La joven, miembro de Urrunhurbil, grupo local de apoyo a los familiares de los presos, encontró el objeto en el parachoques de su vehículo el pasado 26 de agosto.

Según indicó Emilie Martin, de Askatasuna, Laurence Marinea tuvo un accidente con el coche el 14 de agosto, y llevó su vehículo para reparación al taller. Allí, al desmontar el parachoques encontraron el dispositivo de vigilancia, por lo que avisaron a la vecina de Urruña.

Junto a la abogada Maritxu Paulus-Basurco, hicieron constatar el hallazgo ante un agente judicial. Tras realizar los trámites pertinentes, la abogada presentó, el martes pasado, una denuncia en el tribunal de Baiona. Paulus-Basurco precisó que se trataba de un aparato electrónico con tres broches unido a una antena GPS. «Hemos presentado una denuncia por ataque a la vida privada y a la libertad de movimiento», precisó la letrada. En los últimos diez años es el cuarto caso de espionaje policial contra militantes abertzales en Ipar Euskal Herria que se detecta.

«Esperamos que, a diferencia de los casos anteriores, la denuncia será admitida», insistió Emilie Martin. Askatasuna mostró, junto a los concejales de Urruña Teresa Halsouet y Filipe Aramendi y el de Hendaia Iker Elizalde, su solidaridad con Laurence Marinea. Aramendi recordó que «en un Estado de Derecho, estos hechos son inaceptables».

Traba al proceso

«Es inconcebible teniendo en cuenta el proceso que se ha abierto en Euskal Herria. La izquierda abertzale ha dado muchos pasos hacia adelante para la resolución de este conflicto. Por parte de los estados francés y español solo ha habido actos de represión y seguimiento cuyo objetivo principal es el de obstaculizar el proceso», denunció Elizalde. Askatasuna pidió a la Policía que deje de acosar y a las autoridades francesas y españolas que respeten los derechos. «No conseguirán hacer callar un proceso ya en marcha».