No es nueva la relación entre la mentira y el mundo de la montaña, pero en tiempos en que internet (blogs personales, noticiarios en red, redes sociales...) propaga en tiempo virtualmente nulo y de forma extensiva los últimos logros deportivos, el asunto adquiere otra dimensión.

Y si es un deportista -llamémosle `de élite'- el sospechoso de faltar a la verdad, la cosa va a mayores, pues se mezclan en el camino intereses económicos y de patrocinios.

Ante el logro autoproclamado en su sitio web por una conocida escaladora francesa, en donde se airea la escalada de un 9a igualando la marca femenina mundial establecida por Josune Bereziartu, el silencio de muchos medios europeos ha sido clamoroso.

Dada la extensa rumorología sobre el tema, Cedric Larcher, responsable de Kairn.com, una de las páginas web de montaña más influyentes, declara algo así de fuerte: «Como hemos descubierto que .... [aquí va el nombre] miente un montón sobre sus escaladas, hemos decidido -junto con otros lugares web miembros del Climbing Web Network, como UKClimbing, Klettern, Belclimb...- no publicar nada sobre ello si no hay testigos independientes. Varios elementos nos hacen pensar que, de nuevo, ella no hizo lo que declara -añade-. Ella es fuerte, muy fuerte, pero ella (y sobre todo su padre) mienten demasiado».

¡Toma ya diplomacia!. Sobre todo la alusión a su padre nos induce a elaborar sabrosos guiones cinematográficos. Las cordadas entre padres e hijos no suelen dar resultados, pero si tu padre es el relaciones públicas...