Anaitasuna 27

Torrevieja 28

El ajustado marcador final resulta engañoso. Anaitasuna estuvo todo el partido a remolque -incluso con desventajas de ocho puntos- y sólo al final apretó los dientes y arriesgó con una presión en toda la cancha que casi rescató un punto.

Los de Aitor Etxaburu estuvieron muy imprecisos en ataque, con numerosas pérdidas de balón que propiciaron las rápidas contras de Ortigosa y David Cuartero, quienes anotaron casi la mitad de los goles de la escuadra alicantina. Los navarros incluso desaprovecharon tres penaltis -no así su rival, que transformó los cuatro de que dispuso-, que fueron otra de las claves de la segunda derrota consecutiva en casa.

Arreones sin premio

Sólo se salvaron los dos arreones que los locales protagonizaron en ambos periodos, que les sirvieron para aproximarse en el electrónico con un 8-9 (m.20) y un 20-23 (m.45) en un encuentro en el que se esperaba la primera victoria verdiblanca.

Pero Anaitasuna nunca estuvo metido en el choque, sus hombres se mostraron torpes y remisos ante la meta contraria, además de que faltó determinación desde el banquillo para detener el juego del adversario en aquellas fases en las que le metió la directa.

Tras la derrota, el reto es volver a dar la sorpresa ante el Naturhouse La Rioja, que viene de perder en propia cancha ante el Atlético de Madrid. Para este partido, además de los dos siguientes ante colchoneros y Sagunto, es baja segura el meta Schulz, convocado por la selección argentina.