LAB presenta su batería de medidas para aumentar los ingresos fiscales
Equiparación en el tratamiento a las rentas del trabajo y del capital, aumento de los tramos del IRPF para los más pudientes, gravamen sobre las viviendas vacías, fin de los incentivos a los planes de previsión complementaria y de la tributación por módulos, eliminación de las bonificaciones en el Impuesto de Sociedades y verdadera lucha contra el fraude son algunas de las propuestas presentadas por el sindicato.
Imanol INTZIARTE | DONOSTIA
LAB hizo ayer público un documento en el que expone sus propuestas de reforma fiscal para implementar «un sistema tributario justo, solidario y redistributivo». Rafa Izquierdo, responsable de Política Económica, fue el encargado de desgranar las posiciones del sindicato y arrancó su exposición recordando que la política de recortes aplicada por las diferentes administraciones «no sólo se ha demostrado ineficaz para salir de la crisis, sino que además nos ha colocado a las puertas de una nueva recesión».
Izquierdo resaltó que las medidas fiscales adoptadas durante los últimos años tienen mucho que ver también en la bajada de la recaudación, con reformas que «sistemáticamente han favorecido a las clases sociales de rentas más altas, a las rentas de capital y a los beneficios empresariales».
En este sentido, destacó el «excesivo peso» de los impuestos indirectos, que gravan el consumo y cuyo máximo exponente es el IVA, frente a los impuestos directos, que gravan las fuentes de riqueza, la propiedad o la renta, caso del IRPF.
Rentas de trabajo y de capital
Este último se aplica tanto a las rentas de trabajo como a las de capital. Rafa Izquierdo denunció que «mientras las rentas del trabajo están sometidas a una escala de gravamen progresiva, con tipos impositivos más elevados (entre el 23% y el 45%) a medida que aumenta el nivel de ingresos, las rentas de capital se gravan a un tipo fijo muy bajo, el 20%, independientemente de cuál sea su cuantía»..
Además, destacó que «el 90% de la recaudación por IRPF proviene de las rentas del trabajo» y que en torno a este impuesto existe un importante fraude fiscal entre quienes no están sujetos a una nómina.
Como dato, expuso que los trabajadores por cuenta ajena «declaran una media de ingresos que supera en un 62% a la renta media declarada por el colectivo de autónomos y profesionales».
En cuanto al Impuesto de Sociedades, el responsable de Política Económica de LAB puso en en primer lugar sobre la mesa que existe «una doble contabilidad», con lo cual hay empresas que declaran muchos menos beneficios -este impuesto sólo se paga si hay ganancias- de los que obtienen en realidad.
Partiendo de esta premisa, recalcó que descontadas las deducciones y bonificaciones fiscales, «el tipo efectivo que realmente pagan las empresas es del 12,7%», cuando «el tipo medio efectivo en la Unión Europea se encuentra en torno al 22%».
Tras realizar este repaso a la situación actual, el sindicato abertzale presentó su batería de «medidas urgentes», entre las que se contemplan, respecto al IRPGF, igualar las bases y las escalas de la rentas de trabajo y de capital, aumentar el número de tramos y los techos para las rentas más altas -por ejemplo en Bégica se llega al 53,7% y en Suecia al 56,4%-, gravar la propiedad de viviendas vacías, cancelar los incentivos dedicados a promover los sistemas de previsión complementaria (EPSV) y suprimir la declaración por módulos.
En cuanto al Impuesto de Sociedades, LAB reclama la eliminación de «deducciones, bonificaciones y demás incentivos fiscales que han reducido hasta el 12,7% el tipo efectivo», así como la revisión de los «tratamientos excepcionales» por los cuales «existen multitud de casos singulares en los que se aplican tipos impositivos más reducidos».
Además, aboga por restablecer el Impuesto de Patrimonio, eliminar la exenciones establecidas en el Impuesto de Sucesiones en función del grado de parentesco y gravar las transacciones financieras.
Junto a estas medidas, el sindicato demanda una mayor coordinación interinstitucional en la lucha contra el fraude fiscal, con mayores medios técnicos y humanos y un más duro régimen de sanciones para quienes lo cometan.
La secretaria general de LAB, Ainhoa Etxaide, subrayó que la apertura del debate sobre la fiscalidad en Araba, Bizkaia y Gipuzkoa -no así en Nafarroa, donde el Gobierno «no quiere hablar del tema»- ha dado la razón a quienes hace ya tres años defendieron que la crisis no se podía solucionar sólo mediante la vía del recorte de gastos, sino que era necesario aumentar los ingresos.
Etxaide advirtió de que «algunos están usando este debate para defender que no se puede cambiar, que es peligroso», si bien resaltó que hay una administración, la Diputación de Gipuzkoa, que «sí ha presentado una propuesta en la línea de lo planteado por muchos sindicatos y agentes sociales». También se refirió a la propuesta de Confebask, a la que acusó de «mentir» cuando «habla de la creación de empleo, ya que su única prioridad es tener empresas más rentables».
Preguntada por la propuesta de Patxi López para debatir la reforma fiscal en el Parlamento de Gasteiz, la secretaria general de LAB acusó al lehendakari de «intentar liderar un debate sin competencias» con la intención de «hacerse un hueco, jugar un papel que no le corresponde o intentar hacer política mediática cuando se acercan las elecciones».
Precisamente, el PSE registró ayer una iniciativa parlamentaria para que se cree una comisión en la Cámara autonómica en la que participen también las diputaciones con el fin de diseñar las directrices generales de una nueva fiscalidad. Esta propuesta tiene lugar después de que la Mesa del Parlamento haya rechazado tramitarla por dos veces consecutivas. I.I.
Ainhoa Etxaide informó de que el sindicato que dirige se reunirá este próximo viernes con los rectores de la Diputación de Gipuzkoa, gobernada por Bildu, para tratar sobre sus respectivas propuestas de reforma fiscal.
