Hasta treinta denuncias fueron ayer interpuestas en el Juzgado de Guardia de Bilbo por la actuación de los agentes de la Ertzaintza en el transcurso del operativo que acabó, a finales de setiembre, con el desalojo y derribo de Kukutza III, en Errekalde. Los afectados solicitan que se identifique a los ertzainas que se «excedieron» en su intervención, ya que golpearon «con saña y sin motivo» a vecinos que se encontraban fuera del perímetro de seguridad establecido y que lo único que hacían era protestar contra el desalojo del gaztetxe.

En las denuncias entregadas en el juzgado se incluyen partes médicos y diversos testimonios, indicándose que, del 21 al 24 de setiembre, a raíz de las cargas policiales se detuvo a 67 personas y se causaron lesiones, algunos de ellas graves, a más de un centenar de ciudadanos.

Con esta iniciativa, se persigue que se actúe penalmente contra aquellos ertzainas autores de los hechos para posteriormente solicitar las subsiguientes responsabilidades a los mandos tanto policiales como políticos, con referencia expresa al consejero de Interior de Lakua, Rodolfo Ares.