Nueva Zelanda y Francia se enfrentan mañana, a partir de las 10.00 en la final de la Copa del Mundo, en el estadio Eden Park de Auckland. El partido se podrá ver en directo a través de Canal + deportes (dial 9). Será la misma final del año 1987.

Francia es claramente la sorpresa de esta Copa del Mundo. No por su historia en los mundiales, ya que ha hecho grandes campañas llegando a dos finales, en 1987 y 1999. Pero lo demostrado por los bleues, principalmente en la fase de grupos, no era muy alentador. En los cuartos, el XV del Gallo cambió radicalmente su forma de juego y sorprendió a los ingleses. En las semifinales eliminó a Gales, pero no lo mereció. Jugó más de una hora con uno más, pero a pesar de ello, la imagen que ofreció fue mala.

Pese a jugar mal, sólo ha perdido dos partidos en este Mundial. Uno frente a los All Blacks, que no debe valer como referencia para la final de mañana, y la otra frente a una débil Tonga, aunque para entonces ya había logrado el billete para poder jugar los cuartos de final.

Se ha hablado mucho del vestuario, donde parece que los jugadores no están muy de acuerdo con su entrenador en la mayoría de las cosas, pero, siendo una final, todos querrán ganar y dejarán en el vestuario las desavenencias que tengan entre ellos y saltarán al césped con la intención de traer a Europa la Copa del Mundo.

El panorama para los All Blacks es mucho mejor. Por su juego, por jugar en casa y por su historia, Nueva Zelanda es el claro favorito para quedarse con este Mundial. Llegó a los cuartos de final ganando cómodamente su grupo.

En los cuartos de final venció, a Argentina por 33-10 en un partido peleado, quizás en el peor encuentro que ha realizado en este torneo. Pese a ello, el seleccionador argentino solo pudo hacerles frente a los neozelandeses durante 50 minutos. Luego aparecieron los espacios para los de negro y supieron resolver el partido tranquilamente.

En semifinales se les presentó un partido complicado ante Australia, pero los All Blacks hicieron un duelo perfecto en todas las líneas y no dieron lugar para la sorpresa y derrotaron a los Wallabies por 20-6. Nueva Zelanda tiene todo a su favor para poder festejar su segundo Mundial pero ante Francia nada se sabe y se espera que sea un choque totalmente diferente al de la primera fase. Además, desde que se lesionó Carter, la preocupación de los seguidores oceánicos ha aumentado. La presión es de ellos. Ganar entra dentro de la lógica y perder sería un fracaso. En Francia pasa todo lo contrario. Tras un Mundial más flojo de lo esperado están en la final. Perder sería lo normal, nadie cuenta con ellos para ganar y eso les debe de dar más tranquilidad. Tienen jugadores de calidad y con capacidad para derrotar a los locales. Además, el garaztarra Imanol Harinordoki, el único vasco del Mundial, será de la partida.

Equipos decididos

Tanto Nueva Zelanda como Francia tienen decididas las alineaciones. Israel Dagg, Jane, Smith, Nonu, Kahui, Aaron, Cruden, Weepu, Read, McCaw, Kaino, Whitelock, Thorn, Franks, Mealamu y Tony Woodcock será la alineación que vaya a presentar el combinado local. Poux, Servat, Mas, Pape, Nallet, Dusatour, Bonnaire, Harinordoki, Yachvili, Parra, Palisson, Merloz, Rougeire, Clerc y Medard será el quince que pondrá en escena el técnico francés Lievremont.

El árbitro sudafricano Craig Joubert será el encargado de dirigir la final. El colegiado africano ha sido uno de los más destacados del Mundial y también se encargó de arbitrar la semifinal entre Nueva Zelanda y Australia. Estará asistido en las bandas por el irlandés Alain Rolland y por el galés Nigel Owens.