La Real no pudo encontrar premio a la apuesta defensiva de Montanier para intentar controlar el potencial ofensivo del Madrid, que se encontró muy cómodo en el primer tiempo y aguantó en el segundo para lograr su sexta victoria consecutiva y dejar a los blanquiazules en una mala situación clasificatoria tras sumar un punto en los últimos seis partidos.

El encuentro dejó unas sensaciones negativas porque no es bueno que la Real cambie de forma de jugar cada partido y se distancie tanto de la idea original que en el campo del Levante se confirmó como válida. Es evidente que no es lo mismo enfrentarse al Madrid que al Levante, pero es importante tener una personalidad. Cierto es que el segundo tiempo la Real tuvo dos ocasiones para empatar, pero perdió y para perder era mejor hacerlo con la idea original.

Montanier cambió de sistema y revolucionó su alineación una semana más. Pasó de un planteamiento exageradamente ofensivo ante el Getafe al ultradefensivo de ayer con una línea de cinco defensas y otra de cuatro centrocampistas muy cerca, pero sin esmerarse en el trabajo defensivo en el primer tiempo.

Los jugadores blancos jugaron hasta el descanso con mucha comodidad, sin recibir ninguna presión y así llegó pronto el primer gol en una acción en la que Coentrao pudo avanzar sin oposición y aprovechó el movimiento de Higuain, al que no siguió ningún central. A pesar de acumular jugadores defensivos, la Real no defendía bien, ni se mostraba agresiva. Tardó 27 minutos en cometer una falta, y la hizo Vela, y Markel era el único que presionaba como debía hacerlo todo el equipo. Así costaba mucho recuperar el balón y cuando llegaba a pies de los blanquiazules eran incapaces de dar dos pases seguidos..

Jugada polémica

En todo el primer tiempo sólo se puede rescatar una jugada en ataque en el primer minuto en la que tras un envío largo Vela se quedó solo ante Casillas y un asistente lo anuló con un fuera de juego inexistente. Era tan escasa la oposición que encontraba, que el Madrid se relajó e ir al descanso con 0-1 era lo mejor que podía pasar a la Real, que mejoró en la segunda mitad, jugó con más intensidad, buscó la anticipación, presionó más arriba y consiguió que el Real Madrid no estuviera tan cómodo como en el primer tiempo.

Además los blanquiazules empezaron a llegar con peligro al área de Casillas con dos buenos disparos de Vela y Griezmann que detuvo el meta madridista. Por contra, el Madrid apenas inquietó en un centro con el exterior de Di María. Pero con sólo dos ocasiones en noventa minutos, con remates en ambos casos desde lejos, es difícil puntuar ante el Real Madrid.