Raimundo Fitero
Lecciones baratas
La entrevista que «La Noria» realizó a la madre de «El Cuco», uno de los implicados en el asesinato y posterior desaparición de cadáver de Marta Castillo se está convirtiendo, a su pesar, en una acumulación de lecciones de ética periodística barata, de presión mediática electoral y de toma de postura de los anunciantes ante un hecho singular. Es un tema sensible porque se ha puesto de moda que los familiares de las víctimas adquieran una importancia mediática y política que excede cualquier razonamiento legal o social.
Parece que la culpa es hereditaria, incluso con efectos retroactivos, y una madre, por el hecho de haber engendrado a un hijo, es responsable de cualquier acción de su vástago. Todo se envenena cuando se conoce que el testimonio de esa madre ha costado dinero. O sea, que ha ido cobrando al programa de televisión. ¿Cuál es el problema? He escuchado a los más impresentables intoxicadores televisivos diciendo argumentaciones demagógicas que alcanzan el delirio. Incluso la familia de Marta del Castillo solicita ese dinero para ellos. ¿Por qué? ¿Por derechos de autor? No se entiende esta reclamación.
El nivel ético para entrevistar a quién sea pertenece a otro plano de la polémica. Casi todo es cuestionable si aplicamos reglamentos estrictos, y la madre mencionada no hizo ningún tipo de apología, acaso defender a su hijo, como pudo. Pero se lanzaron los buitres ante la posible carroña, han hecho mucha campaña brutal y llegamos a otra situación aleccionadora contradictoria: algunos anunciantes se retiran de «La Noria». Y dan sus nombres de marca, y se hacen publicidad gratuita entre los sectores más intransigentes de la sociedad.
Lo que debemos es tomar nota de la situación: los anunciantes ejercen una presión económica censora sobre el programa y sus responsables. Es lo que hacen de manera constante. La publicidad puede ser neutra, busca consumidores, pero los anunciantes tienen ideología y con sus decisiones dan y quitan programas. O periódicos. O radios. Son el poder secreto de la programación y aquí se han mostrado para que los identifiquemos una vez más y obremos en consecuencia.