Organizada por la plataforma vecinal ``Auzoan Hazi, Hezi, Bizi'', el Casco Viejo de Gasteiz será escenario hoy de una jornada especial que tiene como protagonista a la escuela y que servirá como altavoz a la demanda popular de unas instalaciones acordes a las necesidades del barrio, dados los problemas de espacio que limitan la actividad del actual centro por el gran incremento de la matriculación.

``Eskola eguna'' es el lema de esta iniciativa lúdica que se celebrará en varios recintos: Landatxo, Gaztetxe, Etxauri Plaza o el propio colegio Ramón Bajo, donde se han organizado visitas para ver in situ la situación de las instalaciones. El programa anuncia hinchables, talleres, animación callejera, juegos y actuaciones musicales que se repartirán a lo largo del día, desde primera hora de la mañana.

La fiesta de hoy persigue, asimismo, llamar la atención sobre la reivindicación de la plataforma vecinal de un nuevo proyecto, que además de mejorar las instalaciones escolares dotaría de equipamientos culturales al Casco Viejo, y que ha encontrado el respaldo de varios colectivos y organizaciones de Gasteiz.

De hecho, también conocidos rostros del mundo de la cultura se han pronunciado a favor de la solución planteada por la plataforma ciudadana, que defiende un proyecto para «convertir el Palacio Eskoriatza-Ezkibel en un centro educativo y cultural, destinando las instalaciones de la antigua Escuela de Hostelería y frontón adyacente a la nueva escuela, y el palacio al centro cultural abierto al barrio y a la ciudad».

Llamamiento a implicarse

La adhesión que suscribe cerca de una veintena de personas parte de la base de que ésta es la solución más adecuada para una escuela «que ha triplicado el número de alumnos en menos de diez años y ha pasado de ser estigmatizada a ser un referente en pedagogía intercultural e inclusiva». Resaltan que la escuela se encuentra «en riesgo» porque ocupa «un edificio envejecido en el que no se contemplan mejoras sustanciales y además no se le permite disponer de más espacio». El otro problema, según indican, es que hay un proyecto de polideportivo de varias plantas, cuya construcción ocuparía parte del patio de recreo actual.

«Como personas vinculadas a la cultura, ¿cómo no apoyar un proyecto que contempla, entre otras cosas, la biblioteca de que carecemos en el Casco Viejo, una sala para conferencias o una sala multiusos para actuaciones culturales?», plantean.

Por otra parte, hacen un llamamiento a las instituciones «para que cambien de actitud» y a los vecinos, para que se impliquen en defender la escuela.