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ELECCIONES EN UN NUEVO TIEMPO

Rajoy remarca que la decisión de ETA es «buena noticia» y reclama «sensatez»

Aunque éste no sea el tema principal de su campaña, centrada en la crisis, PP y PSOE polemizan ya también sobre quién sería mejor presidente del Gobierno para gestionar la situación creada por el cese definitivo de la lucha armada. Rajoy calma a su sector más duro.

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R.S. | IRUÑEA

Mariano Rajoy, máximo candidato a la Presidencia del Gobierno español, lanzó ayer un mensaje al sector del PP más encastillado. En una entrevista a ABC Punto Radio, defendió que ante la situación nueva creada por ETA «hay que ser ecuánime, ponderado y sensato en los juicios».

En coherencia con ello, planteó que «no hay que ponerse en posiciones que no llevan a ninguna parte». Y recalcó que el cese definitivo de la lucha armada decretado el pasado 20 de octubre le parece «una buena noticia», aunque no sea «suficiente», y no entiende que haya gente a la que no le gusta.

«Yo ni creo ni dejo de creer –dijo sobre el anuncio de ETA–, pero a mí me parece una excelente noticia que llevamos esperando 40 años». Ahora insistió en que el reto es que «se disuelvan y lo hagan de manera irreversible».

Rajoy añadió que ya fue ministro de Interior en el gobierno de José María Aznar y que por tanto habla «con un cierto conocimiento de causa».

Junto a ello, reiteró que no cree que la decisión de ETA sea fruto de concesiones políticas del actual Gobierno, una afirmación que hizo ya el mismo 20 de octubre y que suscitó revuelo en los sectores duros del PP que ven algo oculto.

Más concretamente, Rajoy explicó que en 2006, como líder del PP «fui muy contundente» con el Gobierno de Zapatero «porque estaba en un proceso de negociación política con ETA, no informaba a nadie y encima lo negaba». Sin embargo, añadió que en la segunda legislatura Zapatero «cambió de forma de actuar. Y si yo critico una cosa y luego se hacen las cosas como a mí me parecía que había que hacerlo, no voy a criticar ahora al gobierno», concluyó el candidato del PP a residir en La Moncloa después del 20-N.

Benegas y Rojo

Frente a ello, diversos dirigentes del PSOE salieron a la palestra para argumentar que Rajoy siempre será peor que Alfredo Pérez Rubalcaba para afrontar la nueva situación.
Fue el caso de Txiki Benegas, candidato al Congreso por Bizkaia, que sostuvo que Rubalcaba gestionará el tema «mucho mejor» que Rajoy, al que ve como «una incógnita».

Argumentó que «es evidente» que el cese definitivo de la actividad armada de ETA se ha producido «bajo dos gobiernos socialistas», lo que entiende que «nos da derecho a gestionar la paz. Se abre una nueva etapa porque aún hay heridas abiertas y mucho dolor, y eso requiere de la gran política», añadió. No obstante, se negó a concretar medidas para afrontar por ejemplo la situación de los presos. Preguntado por ello, sugirió «tener prudencia y calma».

Javier Rojo, líder alavés del PSE y actual presidente del Senado, añadió que Rajoy «no ha estado a la altura de las circunstancias» en la actual crisis económica ni en el proceso abierto en 2006, por lo que «no merece ser el presidente de todos los españoles».
«¿Por qué no decirlo? Vamos a recordar lo que ocurrió en la pasada legislatura en el proceso de paz», planteó Rojo en relación a la oposición férrea del PP. «Que cada palo aguante su vela y cada uno asuma su responsabilidad. Nosotros, la nuestra; pero Rajoy, la suya».

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