El Tribunal Supremo español ha ordenado retirar la placa colocada en la fachada de la Diputación guipuzcoana en la que se recoge una declaración institucional en contra de la obligatoriedad de hacer ondear la bandera española en el palacio foral.

La Sección Cuarta de la Sala de lo Contencioso-Administrativo del TS da la razón así a la Abogacía del Estado, que presentó un recurso de casación después de que el TSJPV desestimara su petición de retirar la placa. Colocada en febrero de 2010, cuando el jeltzale Markel Olano estaba al frente de la Diputación, recoge una declaración aprobada por el Consejo de Diputados en la que se afirma que la bandera española es «un símbolo impuesto».

Según el abogado del Estado, la placa suponía un «indebido cumplimiento de la sentencia del 30 de setiembre de 2005». Para el alto tribunal, «tiene razón el abogado del Estado cuando denuncia una ejecución fraudulenta» de dicha sentencia, ya que se trata de que la enseña ondee conforme a la Ley de Banderas, que «implica que no ha de existir interferencia alguna tras su colocación en el ámbito que corresponda».

El actual diputado general, Martin Garitano, tachó de «absolutamente anacrónica» la «imposición» de la rojigualda, ya que «los pueblos son los que eligen sus símbolos». Señaló que los servicios jurídicos analizan la sentencia «para ver si cabe recurso». Aralar pidió a Garitano que no la acate.