PRESUPUESTOS Y FISCALIDAD
El PP opta por pactar con el PNV para ir cerrando el paso a Bildu
Ambas formaciones alcanzan un acuerdo de presupuestos inédito en Bizkaia y Antonio Basagoiti reconoce que su objetivo es «que este país no lo dominen Amaiur y Bildu»
Ramón SOLA | BILBO
El PP facilitará la aprobación de los presupuestos al jelkide José Luis Bilbao en Bizkaia, gracias a un acuerdo inédito en esta institución y que se firmó ayer al mediodía. Hasta la actualidad, cuando lo había necesitado el PNV siempre había recurrido al PSE. Ahora surge un nuevo eje que tiene como anclaje la sintonía de ambos partidos en política fiscal. Sin embargo, va mucho más allá, según admitió Antonio Basagoiti al situar este pacto en un objetivo estratégico: impedir que «este país lo domine Amaiur o Bildu».
Tras los contactos privados en los últimos tiempos entre Iñigo Urkullu y Mariano Rajoy que ya son conocidos, Basagoiti añadió otro dato: el PP llevaba tiempo «trabajando» con el PNV, desde la premisa de que la centralidad del país debe recaer «sobre partidos que no defienden posiciones radicales y rupturistas. Es bueno que el eje recaiga en partidos que creen en la convivencia, en el Estatuto y en la pluralidad de Euskadi», añadió. «Aquí se puede convivir sin tener que dar regalos a quienes han amenazado la democracia durante tantos años», dijo también en una entrevista a Radio Euskadi.
Al mismo tiempo, saludó que estos pactos permitan al PP situarse «en la centralidad» y demuestren que «podemos llegar a acuerdos con otras formaciones». Y que sirvan igualmente para acabar con lo que Basa- goiti denominó como «política de satanización del PP».
Su homólogo del PNV, Iñigo Urkullu, también remarcó el recorrido político que pueden tener este tipo de acuerdos. Si bien comenzó indicando que «no hay ninguna estrategia por debajo» del pacto presupuestaria en Bizkaia, acto seguido afirmó que «una vez que se ha dado la normalización política plena, ha llegado el momento también de normalizar el ejercicio de la política y el discurso».
En declaraciones a Radio Popular, apuntó que «aquí los juegos son abiertos, y Bildu no podrá reprochar al PNV nada que pueda hacer con un partido que se dice constitucionalista, por mucho que sea el PP, porque Bildu también tiene su vinculación con el PSE-EE, y probablemente en el futuro también la tendrá con el PP», auguró.
Este acuerdo se produce al final de una semana en que se ha confirmado plenamente que el equipo del PNV en Bizkaia, con Andoni Ortuzar y José Luis Bilbao a la cabeza, es el más ligado la línea marcada por Urkullu. El presidente del EBB se ha descolgado con unas inhabituales declaraciones contra sus compañeros de partido en Araba y Gipuzkoa, reprochándoles que sus resultados electorales han sido pobres. Les ha instado a abandonar el «discurso identitario» para centrarse en un modelo centrado en la gestión.
«Más que presupuestos»
El acuerdo de Bilbo fue suscrito a mediodía de ayer por los representantes de PNV y PP en las Juntas Generales. Desde esta segunda formación, Esther Martínez aseguró que el pacto va «más allá» de los presupuestos y consideró que «será el comienzo de un nuevo tiempo».
Tras la rúbrica comparecieron en rueda de prensa, de manera separada, Martínez y Unai Rementeria, representante del PNV en las Juntas. Martínez indicó que el pacto incluye iniciar una serie de reformas en materia fiscal y tributaria, centradas en los autónomos y las pequeñas empresas.
Rementeria, por su parte, justificó el acuerdo en que el PP es el único partido que no ha rechazado las dos cuestiones que afirma priorizar la Diputación de Bizkaia: el mantenimiento de las inversiones y los servicios sociales.
Martínez se encargó de detallar algunos de los pormenores del acuerdo, que incluye una rebaja en el peaje de los túneles de Artxanda, con una bajada en las tarifas vigentes para todos los vehículos de entre el 35 y el 50%, a los que se intentará añadir otra después. También prevé ayudas para que menores de 35 años puedan crear empresas.
PNV y PP también mantienen sintonía en política fiscal en Araba, pero su portavoz en las Juntas del territorio, Ramiro González, afirmó ayer que no contemplan extender allí el pacto de Bizkaia. Consideró que el proyecto presupuestario del equipo de Javier de Andrés «no se arregla vía enmiendas», sino que tiene «un déficit estructural».
«Supongo que en Bizkaia el pacto se ha logrado mediante un acuerdo con partidas en las que el PP ha conseguido introducir sus criterios», dijo González, que consideró que hacer lo mismo en Araba resulta «tremendamente difícil». El PP tiene allí el apoyo del PSE, pero necesitaría algún socio más para sacar adelante las cuentas. GARA
Bildu criticó con dureza este acuerdo, que califica de «fraude» por el ocultismo previo. Tras haber salido a la luz, entiende que queda claro el motivo por el que PNV y PP intentaron atrasar la reunión del Órgano de Coordinación Tributaria: «No querían que trascendiera este acuerdo hasta después de las elecciones del domingo».
Los soberanistas de izquierda constatan que el PNV siempre ha querido pactar con el PP. Por su parte reclaman «un cambio integral, porque es imposible responder a la grave situación económica y social con las mismas políticas y recetas anteriores». En consecuencia, exigen cambios en política fiscal, menos macroinfraestructuras y más dinero para los ayuntamientos.
Después de alertar de que «se está viendo cada vez más claro que está surgiendo una nueva alianza en favor de políticas de derechas», Bildu anticipa que presentará enmienda a la totalidad y parciales contra este proyecto de presupuestos, «respondiendo a los 120.000 vizcainos que han puesto su confianza en nosotros».
El PSE también salió al paso de este pacto PNV-PP en una rueda de prensa de su secretario de Economía, Industria y Empleo, Carlos Totorika, para quien ambos partidos «están pactando una visión de la fiscalidad en la que no existe la progresividad».
Totorika citó que en mayo de 2010 el lehendakari, Patxi López, planteó la conveniencia de un «análisis compartido» sobre la fiscalidad y que un año después trasladó una propuesta concreta. Destacó que el gobierno de Bildu en Gipuzkoa «ve con buenos ojos» esas iniciativas porque «se corresponden con una fiscalidad más progresista y equitativa», y lamentó que, por contra, PNV y PP «están planteando que no haya avances».
Para Totorika, es especialmente censurable que ambos partidos no se impliquen decididamente contra el fraude y que impidan activar ya el Impuesto de Patrimonio, «en este periodo de graves dificultades».
