Día internacional contra la violencia hacia las mujeres
Conciencia social sin medios suficientes
Las colaboraciones institucionales y la mentalidad ante la violencia sexista han evolucionado considerablemente en un tiempo relativamente corto en Ipar Euskal Herria. El campo de batalla se centra ahora con los recursos económicos y la coordinación. 333 mujeres han pedido ayuda este año en los tres territorios del norte.
Idoia ERASO
Celos, problemas familiares o crimen pasional, en los casos más trágicos, son términos que están desapareciendo del vocabulario que se utiliza para describir la violencia sexista, aunque todavía siguen vigentes en nuestra sociedad. En Ipar Euskal Herria, las leyes y el trabajo de las asociaciones y cargos electos han hecho que vayan desapareciendo los tabúes, lo que se ha visto claramente reflejado en el aumento de denuncias o de peticiones de ayuda recibidas. Desde el 1 de enero hasta el 31 de setiembre, la Red Local de Acompañamiento (RLA) ha recibido a 333 mujeres. En 2010 se presentaron 175 denuncias en la Fiscalía de Baiona. Cifras que demandan estructuras adecuadas, pero para ello la mayor parte de la financiación viene de los ayuntamientos, que se marcan otras prioridades.
El representante del Estado francés en Baiona, el subprefecto Laurent Nuñez, dio a conocer el proyecto de un nuevo punto de acogida de día. Habló de proyectos y de objetivos, pero se vio obligado a reconocer la insuficiencia de medios estatales: «Es determinante la acción de los ayuntamientos. Estos proyectos necesitan cofinanciación. Los medios del Estado no son suficientes».
Precisamente, es el Ayuntamiento de Baiona el que impulsó la creación del Observatorio de Violencias hacia las Mujeres. Creado en diciembre de 2010, ha permitido hacer una valoración que constata una flagrante falta de medios. «En pocos meses hemos conseguido movilizar a mucha gente, lo que refleja la toma de conciencia que se está dando y la necesidad que existe», aseguró la concejala del Ayuntamiento de Baiona e impulsora del proyecto, Martine Bisauta.
La coordinación es otra de las necesidades imperativas que ha quedado patente con la creación del Observatorio. Ya se ha efectuado un trabajo en equipo y se ha materializado en la creación de un número de teléfono local de escucha y ayuda a las víctimas que surge como complemento del número gratuito estatal (3919). El 05 59 46 40 86 estará en funcionamiento a partir del próximo 1 de enero, 24 horas al día. Se trata de dar apoyo e información a las víctimas desde la cercanía. Se pondrá en marcha con los medios actuales y la participación de varios entes públicos y privados. Una vez en marcha, habrá que valorar su capacidad de actuación sin disponer de nuevos medios a su alcance.
Nebulosa institucional
La nebulosa de las instituciones, asociaciones y centros que forman parte de la asistencia en los casos de violencia machista y el hecho de que cada ayuntamiento tenga una política totalmente autónoma y diferente no ayudan a las mujeres que se encuentran en esta situación. El CIDFF (Centro de Información sobre los Derechos de las Mujeres y las Familias) hace de referente en este sentido, tanto en la formación y la información como la prevención, pero son muchas las instituciones y asociaciones que tienen competencias en el tema.
Además de esa complejidad, que es un problema en sí mismo, la falta de coordinación dificulta mucho el camino a recorrer por la víctima. Para hacer frente a esta situación se ha creado el Observatorio, pero también existe desde el año 2000 la Red Local de Acompañamiento, que integran el CIDFF y diferentes asociaciones.
La puerta de entrada para las mujeres que buscan asesoramiento y ayuda es muy variada. Además del CIDFF, la Gendarmería, la comisaría de Policía y el Hospital de Baiona son las principales puertas de entrada para los casos más extremos. El objetivo ahora es que, a través de la comunicación, la petición de ayuda llegue en situaciones más calmadas y con capacidad de previsión. «Queremos romper el silencio, hablar es salvar», subrayó la integrante de la asociación Planning Familiar Maria José Arana.
Baiona, Angelu y Bokale son los tres ayuntamientos que integran el recién creado Observatorio, al que Biarritz no ha querido sumarse, mientras que Bidarte ha mostrado interés por hacerlo «El problema existe en todo el País Vasco, por lo que esto es una llamada a todo el territorio, me gustaría que ayuntamientos como el de Donibane Garazi también formasen parte de este Observatorio», invitó Bisauta.
Locomotoras y desierto
Las localidades que están realizando un trabajo específico en la lucha contra la violencia sexista se localizan muy fácilmente dada su escasez. Se trata de Baiona, Angelu, Bokale, Donibane Lohizune y Hendaia.
En Donibane Lohizune se creó en diciembre de 2009 un grupo en el seno del Ayuntamiento con varias instituciones públicas, como la Gendarmería, la Subprefectura o la Oficina de Viviendas Sociales. «El problema de la vivienda es crucial. Intentamos que los ayuntamientos hagan sitio para acoger a las mujeres», declaró Yvette Debarbieux, consejera municipal de la oposición e integrante del grupo. Y añadió: «En la costa vasca, de 43 casos sólo dos consiguen una vivienda».
La directora del Centro de Acción Social de Donibane Lohizune, Françoise Besnard, definió así el trabajo que están llevando a cabo: «Estamos trabajando en la sensibilización, ahora somos como una locomotora».
Es muy llamativo el hecho de que todas estas poblaciones se encuentren en la costa, dejando un gran desierto en el interior, donde la única localidad que tiene un servicio permanente de la CIDFF es Donapaleu, una tarde al mes.
Claire Besset-Sabalo, representante del CIDFF en Ipar Euskal Herria, explicaba cómo en el interior, ante falta de referentes claros, las peticiones les llegan a través de la Mutua Social Agrícola (la Seguridad Social para el sector agrícola). «Nos llegan muchos casos a través de los asistentes sociales de la MSA. Si es necesario, nosotras tratamos de desplazarnos». «A pesar de que no hay estructuras en el interior, la comunicación también llega hasta allí y el número de peticiones también ha aumentado en esa región», comentó Besset-Sabalo. Esto debería hacer cambiar las prioridades de ciertos ayuntamientos, como es el caso de Donibane Garazi, donde existía una permanencia del CIDFF pero fue retirada por falta de medios.
cifras que hablan
Entre las 333 mujeres que acudieron a alguno de los actores de la Red Local de Acompañamiento, el 34% residía en Baiona, el 24% de la costa entre Bidarte y Hendaia, y el 12% en el interior. También hubo consultas desde otras localidades de la mancomunidad baionarra y del departamento de las Landas, así como del área metropolitana de París, interesadas en instalarse en Euskal Herria. Los miembros de la RLA quisieron también subrayar el hecho de que, junto a esas mujeres maltratadas, había 325 niños.
Por otro lado, la Fiscalía de Baiona recibió 175 denuncias en el año 2010. «Una cifra que se ha estabilizado en los últimos cuatro años, después de que hubiese un gran aumento», según manifestó la fiscal Anne Kayanakis. De los casos que llegan a formar un proceso judicial, dos tercios reciben penas correccionales y el tercio restante se condena a través de otro tipo de sanciones alternativas.
hoy
A las 11,30 saldrá de Portugalete la 12ª Marcha de Mujeres contra los Malos Tratos, mientras en Donostia, entre otros actos, se entregarán los premios a los trabajos presentados dentro de la iniciativa Beldur Barik.
17 de diciembre
Bajo el lema «Contra las mil caras de la violencia sexista: actúa», el movimiento feminista llama a movilizarse el próximo 17 a las 18.00 en el Arriaga, ante «un problema, social, político y cultural de primer orden
325
niños y niñas han sufrido la violencia sexista infligida a sus madres en Ipar Euskal Herria. Son 333 las mujeres que han acudido a alguna institución en busca de ayuda, muchas de ellas con hijos o hijas menores.