Al Shebab prohíbe a 16 agencias humanitarias operar en Somalia
Al conflicto interminable y a la hambruna endémica que sufre Somalia, se suma ahora la prohibición de las milicias de Al Shebab de operar a organizaciones internacionales como Unicef, Acnur y la OMS, a las que acusa de atentar contra la aplicación de la ley islámica.
GARA
Las milicias de Al Shebab han prohibido la presencia en Somalia a un total de 16 agencias humanitarias internacionales, entre ellas el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur), la Organización Mundial de la Salud (OMS) y el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef). Los milicianos ocuparon y saquearon algunos de estos organismos en el sur y el centro del país. A través de un comunicado, informó de que «ha decidido revocar de forma permanente el permiso para operar en Somalia» a estas agencias y a los Consejos noruego y danés para los refugiados por «exagerar los problemas del país para ganar dinero» y por sus «intentos persistentes de que la población local rechace la completa aplicación del sistema islámico de la sharia».
Un alto responsable de Al Shebab subrayó en declaraciones a la cadena británica BBC que el nivel de actividad de estos organismos no era muy elevado por lo que consideró que su desactivación no ocasionará mayores perjuicios a la población. Remarcó, además, que el Comité Internacional de la Cruz Roja, Médicos Sin Fronteras y la ONG italina Copi pueden seguir operando como hasta ahora.
Sedes atacadas
El responsable de comunicaciones de la OMS en Somalia, Pieter Desloovere, confirmó que las sedes de la organización en Baidoa y Wajid fueron atacadas ayer mismo. Desde Unicef, Jaya Murthy señaló que sus instalaciones en Baidoa fueron ocupadas por milicianos. «A todo el personal que estaba en la oficina se le pidió que se marchara. Todos nuestros empleados están a salvo. Nuestra sede de Baidoa sigue ocupada. Ninguna otra sede de Unicef está ocupada y todo nuestro personal está bien», explicó a Reuters.
Según la ONU, unas 250.000 personas están al borde la muerte por desnutrición al sur de Somalia, zona bajo control de las milicias de Al Shebab. El país afronta la peor sequía desde hace 60 años.