EUROLIGA
El Top 16 pasa por mantener la buena línea como local
El Bilbao Basket, que ha ganado sólo un partido fuera de casa en lo que llevamos de temporada, está obligado a ganar al Cantú hoy en Miribilla para seguir con opciones de pasar a la siguiente fase.
A.A.
El Gescrap Bilbao Basket quiere aferrarse a su potencial como anfitrión para derrotar al Bennet Cantú en Miribilla y seguir con sus opciones intactas de cara a lograr el pase al Top 16. En un Grupo A que lleva camino de batir todos los registros en cuanto a igualdad -hay sólo una victoria de diferencia entre el primero y el último a falta de tres partidos-, los hombres de negro quedarán empatados con los italianos a cuatro triunfos en caso de ganar el choque de hoy.
No será tárea fácil, ya que el Cantú llega a Bilbo con la moral por los aires tras imponerse al Baskonia en la anterior jornada. Su curiosa mezcla de veteranos -con tres auténticos boinas verdes como Mazzarino, Basile y Marconato al frente- y jóvenes con proyección -destacan Shermadini, Micov, Leunen y Cinciarini-, le está dando buen resultado a Andrea Trinchieri. De hecho, los vizcainos pudieron conocer de primera mano cómo se las gasta el conjunto transalpino cuando cayeron 78-69 -con 16 puntos de Shermadini- en el partido que les enfrentó en el Pala Desio en la primera vuelta.
Pero Bilbao Basket tiene un factor importante a su favor: juega en casa. Si contar con el apoyo de la afición es siempre una ventaja, en lo que llevamos de temporada ese apoyo se está convirtiendo en vital. Sumando Liga ACB y Euroliga, los bilbainos han ganado cinco de los siete partidos que han jugado en casa, mientras que se han impuesto en sólo uno de los nueve que han disputado fuera.
Algo parecido ocurre con el Bennet Cantú, que ha ganado los cuatro encuentros que ha jugado en casa y ha perdido los tres de fuera. Y la tendencia se repite en todo el Grupo A, donde sólo se han contabilizado tres triunfos visitantes en los 21 partidos que se han disputado.
Por tanto no es de extrañar que Alex Mumbrú apelara a la afición en la previa. «En momentos como estos es cuando más unidos tenemos que estar. Tenemos que centrarnos en nosotros mismos y explotar el hecho de que jugamos en casa».
La lucha por conseguir al base Chris Paul se ha convertido en el gran centro de atención de la NBA y más cuando los Lakers de Los Ángeles han entrado de lleno en la puja por conseguir sus servicios junto con los del pívot Dwight Howard, lo que podría hacer que Pau Gasol se fuera a los Hornets y Andrew Bynum a Orlando. El objetivo de los Lakers es emular a Miami Heat y conseguir un «Big Three» con Kobe Bryant, Paul y Howard. Aunque todo son rumores e informaciones sin confirmar, la realidad es que Paul ya se reunió el lunes con el gerente general de los Hornets, Dell Demps, y aunque el tono fue cordial y amigable, el jugador le dijo claramente que no piensa firmar un contrato de extensión antes que comience la reducida temporada. La decisión de Paul significa que los Hornets entrarán en la situación de inestabilidad que vivieron los Denver Nuggets con Carmelo Anthony, cuando el jugador se negó a firmar una extensión porque lo único que deseaba era el traspaso a los New York Knicks. Y es que Paul tiene todavía dos años de contrato -cobrando 16,4 y 17,8 millones de dólares en cada uno-, pero puede renunciar al último. EFE
Marko Banic ocupó durante la jornada de ayer la portada de la página web oficial de la Euroliga. En la entrevista al jugador del Bilbao Basket se destacaba que el pívot croata lidera la clasificación de tiros de dos convertidos, 45 en total con un porcentaje de acierto del 68,2%, en su año rookie en la competición.
Mientras los equipos más potentes del continente se lamentan por la marcha de sus jugadores NBA, en Siena se han quedado de golpe sin Rimantas Kaukenas y Ksistof Lavrinovic. El primero se rompió el ligamento anterior cruzado de su rodilla izquierda, mientras que el segundo fue operado de la espalda.
