Victoria del Baskonia en Murcia
Prigioni se sale para lograr una remontada de carácter
El cuadro gasteiztarra se impuso al UCAM Murcia gracias a remontar 11 puntos de desventaja tras el receso. Prigioni, con 27 puntos y 33 de valoración, fue el líder de los de Ivanovic, que jugaron con ocho.
UCAM MURCIA 67
CAJA LABORAL BASKONIA 75
Arnaitz GORRITI
El Caja Laboral Baskonia sigue en pleno proceso existencial de saber de dónde viene y hacia dónde va. Esa incertidumbre que vive en su interior, acrecentada por bajas tan importantes como la de San Emeterio, Milko Bjelica y Macej Lampe, hace que resulte muy complicado ver a este equipo hacer un partido completo. Así las cosas, no extraña ver que los de Dusko Ivanovic debieran remontar para ganar al UCAM Murcia.
Después de llegar con una desventaja de 11 tantos al descanso, 42-31, hacía falta carácter para que un Baskonia con solo ocho jugadores -si es que incluimos a Heurtel y Dorsey en la terna, ya que entre ambos sumaron casi 18 minutos, 4 puntos, todos ellos de Dorsey, y una valoración conjunta de -4- pudiera dar la vuelta a un partido que se estaba jugando al ritmo marcado por Franch, con el propio base, Augustine y Sekulic como principales ejecutores.
Y qué mejor exponente a día de hoy del carácter baskonista que Pablo Prigioni. El base de Río Tercero emergió en su faceta más anotadora y logró 27 puntos, su tope de anotación en su historia en la ACB, aparte de 7 rebotes, un robo y una asistencia. El argentino acabaría con 33 de valoración, récord en su doble etapa en Gasteiz -logró una valoración de 34 en 2003, en las filas del Lucentum Alicante- y, sobre todo, conseguiría que los de Dusko Ivanovic solventaran el encuentro con un demoledor parcial conjunto en la segunda mitad de 25-44.
Prigioni ejerció de general, pero es evidente que no estuvo solo. Brad Oleson también «cogió su fusil» y sumó 16 tantos, mientras que unos desacertados Mirza Teletovic -9 puntos, y 3 de 11 en tiros de campo- y Pau Ribas -6 puntos, 2 de 9 en lanzamientos de dos y de tres- sumaban desde el rebote -12 para el bosnio, 6 para el badalonés- y las asistencias -5 para Ribas, 2 para Teletovic-.
Bjelica y Golubovic tuvieron una actuación menos brillante que estos compañeros, pero también pusieron su granito de arena. Así, el alero serbio anotó dos triples, uno de ellos sobre la bocina que determinaba el final del tercer cuarto. Esa canasta ponía a los de Ivanovic por delante, 53-54, dando un golpe de moral para lo que restaba de partido. Por su parte, Golubovic anotó los tres tiros de dos que lanzó, demostrando que puede acabar con canasta si los pasadores lo ven, pero sobre todo destacó por lo mucho que incomodó a la pareja Sekulic y Augustine y por su contundencia en los bloqueos.
Duelo triplista
El gran partido de Prigioni destaca también por venir desde la anotación. Con Scola como principal socio, el de Río Tercero obtuvo el galardón de MVP en la Copa del año 2006, edición en la que apenas miraba el aro puesto que se dedicaba a asistir sin parar. De hecho, en la jornada de ayer, el técnico murciano Luis Guil insistía en los tiempos muertos que había que parar las situaciones de bloqueo y continuación negándole el pase a Prigioni; «siempre busca la asistencia», recordaba el preparador andaluz.
Pues no. Ya que los habituales receptores de sus pases ayer estaban bien cubiertos -además de muy desacertados-, Prigioni se dedicó a definir por su cuenta, logrando 10 canasta de 15 intentos, con un particularmente afortunado 5 de 8 en triples.
Con todo, Prigioni tuvo un feroz competidor triplista en esos últimos minutos: el ex baskonista Jordi Grimau, que mantuvo el partido en un puño merced a tres triples con el marcador en contra y después de buenas defensas de «perros de presa» como Oleson o Ribas.
Aun así, después de mucho sufrir, el carácter de Prigioni -y el de los «ocho magníficos»- dio la victoria al Caja Laboral Baskonia -cerró el partido con un triple en la cara de Sekulic a un minuto del final- que afronta con esa alegría el duelo del miércoles de la Euroliga frente al Nancy, donde puede certificar su pase al Top 16.
«Creo que en el segundo tiempo hemos encontrado nuestra manera de jugar los 40 minutos», resumió un Dusko Ivanovic satisfecho por el trabajo de los suyos.
«Empezamos bien, pero después bajamos nuestra atención defensiva y el Murcia cogió confianza y jugó bien. Pero en la segunda mitad hemos jugado con paciencia. Hay que jugar los 40 minutos como esos 20», resumió.
Ante la falta de efectivos en el equipo, el montenegrino recordó que «lo importante es que los que estén jueguen bien, y ellos han demostrado que pueden hacerlo».
Mientras, Pablo Prigioni aducía a la «fortaleza mental» del conjunto baskonista sacó para poder remontar.
«La primera parte ellos estuvieron muy bien y sacaron una buena diferencia y a nosotros nos costaba volver al partido. Pero en el descanso hablamos de ajustar algunas cosas, y sobre todo de estar más fuertes mentalmente», declaró.
«Veníamos de un partido muy duro -dijo, sobre el duelo ante Olympiacos- y había que sacar energías para volver al choque. La segunda parte se nos dio mejor, peleamos y fuimos justos ganadores», acabó. A. G.