Los sindicatos CGT, CNT y ESK, y colectivos sociales como Bira Beste Aldera, KEM-MOC, Ekologistak Martxan, Colectivo de Personas en Paro, SOS-Racismo, Nafar Libertarioak y Aldea se concentraron ayer ante el Parlamento navarro para denunciar los recortes laborales y sociales adoptados por la Cámara con la aprobación de los Presupuestos para el próximo ejercicio.

Tras una pancarta con el lema «Recortes no, sí al reparto. Mobilizazioa», los concentrados corearon lemas contra las decisiones del Ejecutivo de UPN y PSN que, en palabras de Xabier Barber (ESK), afectan a «todo lo que es social, como la educación, la sanidad, la renta básica, la cultura y el euskara. Pero no hay austeridad para las cementeras, las grandes obras o los salarios de los consejeros».

«Queremos expresar nuestra protesta ante el Parlamento de Navarra, que es otro de los organismos que también tiene que dar vuelta a su chip y empezar a funcionar de una vez en clave más social para que la crisis la pague quien la ha generado, que es el gran capital, los bancos y los financieros», añadió.

Barber apuntó que «la única manera» de ser «eficiente» en estas protestas y en su intento de que los gobiernos den marcha atrás a esta política de recortes es «llegar a una gran movilización social. En el caso sindical habrá que ir avanzando ya hacia una huelga general». Al respecto, advirtió de que las propuestas de Mariano Rajoy sobre la nueva reforma laboral «no prometen nada halagüeño y, en consecuencia, sólo la movilización social, empezando por la parte sindical pero intentando implicar al conjunto de la sociedad, puede dar la vuelta a esta situación».