Cerca de 80 familias, a las que la asociación Sochocoba del barrio Saint Esprit de Baiona reparte alimentos una vez por semana, se quedaron sin el paquete especial de comida que la asociación tenía previsto distribuir con motivo de las fiestas navideñas.

Su presidente, Francis Belmonte, constató el robo el 22 de diciembre cuando, tras llegar al local, descubrió que los congeladores estaban abiertos y vacíos. «Al principio pensé que alguien los había dejado abiertos por descuido, pero enseguida me di cuenta de que nos habían robado. Es indignante. Más de 280 personas se han quedado sin el paquete de Navidad», declaró Belmonte, quien, junto a otros siete voluntarios, trabaja en la asociación desde hace 25 años.

El local no presentaba ningún estropicio, por lo que suponen que «alguien que sabía muy bien lo que buscaba se ha servido de un juego de llaves que habíamos perdido».

Ante lo ocurrido, el responsable de la asociación que colabora con el banco de alimentos ha manifestado su intención de preparar otros paquetes para la fiesta del nuevo año.

Sin sitio en Angelu

Otra asociación, Les Restos du Coeur de Angelu, ha mostrado su queja estos días por la exigüidad de los locales de los que dispone para la distribución de alimentos. Sólo cuentan con 20 metros cuadrados y han pedido al Ayuntamiento que instale un toldo y asfalte el patio para las filas de gente que se agolpan los días de reparto (más de 150 personas) y que suelen esperar a la intemperie su turno. La asociación, que lleva 27 campañas de invierno, no ha recibido aún respuesta por parte del Consistorio, con quien también quiere negociar la factura de electricidad, que se eleva a 2.000 euros.