No corren buenos tiempos para el Real Unión, que atraviesa su peor momento de la temporada. El solitario punto que ha sumado en las cinco últimas jornadas le han enviado a la 11ª plaza de la clasificación, a siete puntos ya de la zona de play-off.

Mucho ha tenido que ver el complicado final de la primera vuelta, que ha emparejado a los blanquinegros con Ponferradina o Mirandés, pero también la avalancha de bajas a la que está haciendo frente. Desde que Jules Pardo fuera intervenido en diciembre, otros cinco jugadores se le han unido en la enfermería -en algunos casos han pasado también por el quirófano-. Las bajas de Seguro, Mendinueta, Sellarés, Hugo Álvarez y Mario Martínez, unida este pasado domingo a la del sancionado Santi Santos, han dejado al equipo de Roberto Olabe en cuadro.

Una situación que también tiene su reverso positivo. Es el caso de los jugadores del filial Jon Artzamendi y Mikel Urzelai, que el domingo debutaron con el primer equipo.