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Croacia prevé un sí a la UE pese al menor entusiasmo proeuropeo

Los sondeos pronostican un claro «sí» en el referéndum que se celebra en Croacia sobre la adhesión del país a la Unión Europea aunque el entusiasmo de hace unos años a disminuido considerablemente. El miedo a perder la soberanía y las consecuencias de la crisis europea son los mayores argumentos de aquellos que se oponen. Pero todos los grandes partidos, la Iglesia católica y los veteranos de guerra piden el voto a favor para que el país pueda progresar.

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En julio de 2013 Croacia debería entrar en la Unión Europea, aunque primero tendrá que obtener el sí en el referemdum que se celebrará hoy.

Los sondeos así lo prevén, pese a que el euroesceptismo ha ido ganando terreno. Los últimos datos de intención de voto, facilitados por el Ministerio de Exteriores el jueves, indicaron que un 56% de los croatas votarán por su adhesión en la UE, frente al 33% que se opondrá.

El entusiasmo proeuropeo, que en 2003 ascendía a más de un 80% en los sondeos, disminuyó en el curso de las negociaciones (2005-2011), debido a los duros criterios impuestos por Bruselas, que fueron a veces percibidos como «chantaje», aunque sobre todo debido a la crisis económica que sacude a la Unión Europea.

Serán los elecctores quienes confirmen o no el tratado de adhesión firmado con Bruselas el diciembre pasado. El apoyo o la oposición a la adhesión son argumentadas con razones de peso por los habitantes del país.

«No hay ninguna razón para ser entusiasta en 2012. Simplemente es el momento de concluir este trabajo después de los esfuerzos» realizados durante las negociaciones de adhesión, opinó Mirala Banovic, una maestra de escuela, que votará un «si» que es lo más «pragmático» según dijo.

Gorjana Sikic, ingeniero, también votará que sí, porque «somos demasiado pequeños para quedar aislados».

«Votaré en contra. En la UE no seremos nadie y tendremos que escuchar todo lo que nos digan» declaró Darko, un profesor de literatura.

Su opinión es rotunda, «es mejor tener un político totalmente corrupto como fue (el procesado exprimer ministro) Sanader, pero elegido por nosotros, que estar en la situación de que la UE nos imponga al primer ministro, como ha sido el caso de Italia y Grecia».

La independencia de Yugoslavia en 1991, apoyada por el 94% de los ciudadanos, está siendo esgrimida por los euroescépticos con la idea de que costó mucho lograr la soberanía como para perderla de nuevo.

Según la delegación de la UE en Zagreb, los temores que más han expresado los croatas se refieren a la pérdida de la soberanía, la subida de los precios, una avalancha de trabajadores extranjeros y la bancarrota de empresas pequeñas.

Los analistas dicen que la crisis en la Eurozona, los vaticinios sobre la desintegración de la UE, los desordenes y el descontento de la población en Grecia, Rumanía y el Estado Español entre otros también han contribuido. Pero todos los grandes partidos -tanto el Partido Socialdemócrata del presidente como la oposición conservadora- la influyente Iglesia católica- a la que se adscribe el 90% de los habitantes- y los veteranos de la guerra están a favor y hablan de que el progreso es la principal ventaja que traerá la adhesión.

El presidente Ivo Josipovic, afirmó que sería «irresponsable perder esta oportunidad» y el primer ministro admitió que la situación no era buena «pero Croacia no ha tenido una opción mejor que esta».

La ministra de Asuntos Exteriores fue más allá y lo definió como un «asunto de vida o muerte». Añadió que el rechazo tendría consecuencias: «caída en la calificación de nuestros créditos, la retirada de inversiones, pérdida de trabajo».

La campaña para el referéndum comenzó en enero, aunque el Gobierno consideró que durante los seis años de negociaciones había sido un tema constante y que lo mejor es celebrarlo antes de que comiencen los recortes económicos

La adhesión, garantía de los derechos para los serbios

Los serbios de Croacia, que resistieron cuatro años de guerra (1991-95) cuentan con que en el referemdum del hoy -en el que se decidirá si Croacia se adhiere a la Unión Europea- la mayoría vote «si», pues perciben que esto garantizará el respeto de sus derechos.

El alcalde de Dvor, Nikola Arbutina, región donde la mayoría de los residentes son serbios, declaró que las condiciones de vida de los serbios «mejoraron a medida que progresaban las negociaciones de adhesión».

Adherirse a la UE pondrá a disposición de los serbios «una instancia adicional en la que podrán reclamar la protección de sus derechos» argumentó.

Durante las negociaciones, Bruselas impuso un criterio esencial para la protección de los derechos de los serbios, que representaban el 12% de la población de Croacia antes del conflicto.

Después de la guerra, las agresiones y ataques contra la comunidad serbia eran frecuentes, pero poco a poco, bajo la presión de Bruselas, el Gobierno croata consiguió reducirlos sensiblemente.

Las relaciones entre ambas comunidades también mejoraron. De los aproximadamente 250.000 serbios que huyeron de Croacia, 132.000 regresaron a sus hogares y son ahora la principal minoría del país.

Para Milorad Pupovac, líder político de la minoría serbia, el proceso de adhesión tuvo un impacto importante y positivo en su comunidad que contribuyó a su vuelta al desarrollo democrático de Croacia.

«Los serbios contribuyeron considerablemente en el proceso de maduración de Croacia como candidato para adherirse a Europa» afirmó Pupovac. GARA

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