referéndum por la independencia en escocia | Crónica: Conferencia de Jim Mather
«Escocia tiene potencial, pero unas reglas de juego ajenas»
En 1945 había 74 países y en 2011 196, ¿por qué Escocia no puede ser el número 197 y Euskal Herria el 198 o viceversa? El empresario y ex ministro de Industria, Energía y Turismo de Escocia, Jim Mather, está plenamente convencido de los beneficios económicos que la independencia puede aportar a ambas naciones.
Con un lenguaje claro, directo, a medio camino entre lo empresarial y lo político, Jim Mather, ex ministro de Industria, Energía y Turismo de Escocia por el SNP y, actualmente, profesor de universidad, resaltó ayer en la conferencia organizada por la Diputación de Gipuzkoa en Donostia los beneficios socioeconómicos que la independencia puede aportar a naciones como Euskal Herria y Escocia, esta última camino de celebrar un referéndum sobre esta cuestión.
Esa fue, precisamente, una de las promesas electorales del SNP, que cuenta con mayoría absoluta en el Parlamento. Pero para llegar ahí, remarcó Mather, hubo que hacer un análisis exhaustivo de la realidad. El panorama no era muy positivo allá por 2007.
«Nos encontramos con una Escocia con poca capacidad competitiva, con un colapso en las inversiones, con una alta tasa de paro, con una tremenda brecha en cuanto al reparto de la riqueza... Todo ello cuando Escocia tiene un gran potencial; tiene marcas reconocidas internacionalmente, una reputación estupenda, es un país muy conocido, por su whisky, sus faldas escocesas... -señaló en tono jocoso-. Y posee recursos naturales, por algo opera Iberdrola en Escocia», subrayó. «Pero éramos muy dependientse de Londres -matizó-. Las reglas de juego no estaban diseñadas para Escocia. Teníamos, por tanto, que ser inteligentes y romper con esas reglas».
¿Cómo hacerlo? «Con inteligencia y disciplina y aplicando la teoría de las limitaciones, que consiste en hacer una lista de los problemas, una buena cartografía de los obstáculos a los que nos enfrentamos. Debemos ser disciplinados y enfocar toda nuestra atención, sin irnos por las ramas, en abordar el principal problema, que en nuestro caso es un Parlamento escocés con competencias muy limitadas y un Londres adonde van a parar los inversores, las mejores asesorías, que ofrece salarios más altos...», explicó.
Frente a quienes auguran una serie de fatalidades en caso de que Escocia sea independiente, hasta el extremo de ironizar con que «morirán los osos panda del zoológico», Mather subrayó que «la naturaleza está en constante evolución» y, a modo de ejemplo, citó que el SNP pasó de tener 35 escaños en 1999 a los 69 actuales pese a que «el Parlamento está diseñado para que no ocurra algo así».
¿Cómo llegar a la gente? «Con un diálogo cercano, implicándole, preguntándole y definiendo entre todos un nuevo norte. Al final, todo ser humano quiere ser dueño de su destino», destacó entre fuertes aplausos.
El diputado general de Gipuzkoa, Martin Garitano, consideró Escocia «un buen espejo en el que mirarse». A su juicio, la vía escocesa a la independencia «demuestra que en el corazón de Europa se puede constituir un nuevo Estado hoy y que la dimensión de ese Estado no es un problema en el caso escocés o el vasco, sino una oportunidad». Además, destacó que los planes escoceses «rompen los mitos antiautodeterministas».
En declaraciones a Infozazpi, el miembro de la izquierda abertzale Joseba Permach afirmó, por su parte, que el proceso iniciado en Escocia «tiene una importancia vital para todos aquellos independentistas que llevamos años luchando y trabajando aquí en Europa» y más concretamente, en Euskal Herria. En opinión del líder independentista, «el Estado español sabe que lo que en 2014 va a ocurrir en Escocia puede ocurrir y va a ocurrir en Euskal Herria y por eso está nerviosísimo», en referencia a los movimientos de la diplomacia española, que, según la prensa británica, han mostrado a los británicos su oposición a una Escocia independiente.
También la red Independentistak aplaudió el llamamiento al referéndum de Escocia porque «solo las palabras no valen si no vienen acompañadas de hechos». «Nosotros también pensamos que la independencia es lo mejor para vivir libremente, para defender nuestra identidad, idioma, cultura y economía, y para construir una sociedad justa y progresista», afirmó. Independentistak subrayó que Escocia ha demostrado que la independencia «es una opción real y viable, desmintiendo a quienes decían que es algo del pasado, asunto de las colonias de otros continentes, y que los estados están despareciendo». GARA