Lagun Aro GBC Arranca la segunda vuelta con victoria ante el Obradoiro
No dejen entrar al vampiro
Los de Sito Alonso sumaron su quinta victoria consecutiva lejos de casa. Vidal volvió a su mejor versión.
OBRADOIRO 80
LAGUN ARO GBC 88
Arnaitz GORRITI
Una de las características de los vampiros, según el Drácula de Bram Stoker, es que el famoso conde no puede entrar en sitio alguno si no es por invitación. De un tiempo a esta parte, Lagun Aro GBC parece una suerte de vampiro, ya que aprovecha sus visitas para sacar tajada. En la cancha del Obradoiro, después de ganar previamente a Joventut, Gran Canaria, Bilbao Basket y Murcia -amén de al CAI Zaragoza-, el cuadro donostiarra sumaba su quinta victoria consecutiva lejos de Illunbe. Además, Gipuzkoa Basket derrotaba al Obradoiro por primera vez en su historia.
Tras una exhibición de Sergi Vidal -el badalonés firmó ayer 22 puntos, 4 rebotes, 4 asistencias y 13 faltas recibidas para una valoración de 33- y la colaboración estelar de Panko, que sumó 15 de sus 19 puntos en la segunda mitad, con dos triples en los últimos minutos, los guipuzcoanos tumbaron al Obradoiro en un partido muy entretenido, donde los de Sito Alonso hallaron la respuesta al partidazo de Stephane Lasme, que obtuvo una valoración de 37, con 26 puntos y 14 rebotes.
El partido, tras llegar 37-41 al descanso, pareció romperse tras el descanso. Con Salgado -7 asistencias- como maestro de ceremonias -más templado que un Raúl Neto que sumó 13 puntos y 4 faltas... ¡en 9 minutos!-, y pese al mal día de Baron -después de 51 partidos seguidos anotando al menos un triple, el «búho» solo anotó 2 puntos-, los donostiarras abrieron la brecha hasta una máxima de 17 tantos: 47-64.
Pero el conjunto galaico no iba a rendirse. Los de Moncho Fernández apretaron atrás y endosaron un parcial de 24-10 para ponerse a tres puntos en los instantes finales del duelo 71-74.
Tocaba templar los nervios, y Panko los templó con triples que finiquitaron el choque. Lagun Aro GBC suma su novena victoria y supera en el average particular al Obradoiro. Aparte de dar grandes saltos, los donostiarras también dan pequeños pero muy importantes pasos.