Internacional
Los líderes siguen mandando
El sábado hay un ManU-Liverpool en horario chino, mientras Ibrahimovic no jugará al ser expulsado en el Calcio por quinta vez.
Joseba VIVANCO
El gran capitán John Terry y sus supuestos insultos racistas han agitado la competición hasta traer anoche la despedida del seleccionador Fabio Capello, el iracundo Balotelli sigue cumpliendo sus cuatro partidos de suspensión, Fernando Torres suma ya 19 partidos sin marcar un gol entre el Chelsea y España... En la Premier League no da tiempo a aburrirse y no solo por el juego directo y sin pausa que destila cada partido. Aún con la resaca de ese reciente 7-1 del Arsenal de Wenger al Blackburn Rovers, con gol incluido del veterano Titi Henry y doblete histórico del jovencísimo -18 años y 73 días- y nueva estrella gunner Alex Oxlade-Chamberlain, este sábado, en horario `chino' 13.45 (Gol TV) tenemos un atractivo Manchester United-Liverpool, los dos equipos con más títulos del fútbol inglés.
Los de Fergusson son segundos y los de King Dalglish van séptimos, en una clasificación que sigue comandando el City. Los diablos rojos dejaron claro el pasado domingo en Londres, ante el Chelsea, que no renuncian al campeonato. Perdían 3-0 a los 50 minutos en Stamford Brigde y remontaron hasta empatar, con dos goles de penalti incluidos de Rooney y la rehabilitación como portero de De Gea. El promedio de tantos en los partidos de la Premier esta temporada entre miembros del `Big-4', los cuatro grandes, es de casi 5 goles por partido. Brutal.
Como brutal está siendo la racha de los dos poderosos artilleros senegaleses de las urracas del Newcastle, Demba Ba y Papiss Cissé. Marcaron uno cada uno este fin de semana, pero es que desde el comienzo de la temporada pasada suman entre ambos 60 dianas. Mención también para los black cats del Sunderland, que rozaban los puestos de descenso hace dos meses, cuando decidieron confiar en Martin O'Neill y han sumado 22 de 30 puntos posibles.
En Alemania -donde por primera vez desde 1998 ningún equipo local se alzó con la victoria-, el Borussia Dortmund ha ampliado su ventaja en su carrera por retener el título de la Bundesliga después de ser el único conjunto de los cuatro primeros que logró ganar. «Para ganar el campeonato tienes que vencer en muchos partidos», se lamentó el delantero del Bayern Thomas Müller, cuyo equipo empató y está igualado con el Schalke de Raúl en puntos y aventaja en uno al Gladbach -12 goles en contra en 20 partidos-, pero a dos del Dortmund.
Pero no todo fueron caras tristes en Múnich. Mil puntos en la Bundesliga son los que acumula ya Jupp Heynckes. El entrenador del Bayern y ex del Athletic o Real Madrid es el segundo técnico en conseguirlo. El primero, Otto Rehhagel, encabeza la clasificación con nada menos que 1.370.
En el Calcio italiano hubo goleada y de las históricas, y entre dos históricos. El 4-0 final de la Roma de Luis Enrique al Inter es la derrota más severa de los interistas en la Serie A, en los últimos 10 años. Y eso que 4 goles eran los que había anotado su enrachado ariete Diego Milito días antes en el 4-4 de su equipo frente al Palermo. «Lo que está pasando en las últimas semanas no puede seguir dándose. Estamos encajando varios goles y así es difícil poder jugar al fútbol que podemos hacer», comentó el entrenador Claudio Ranieri en su partido 600, en una liga italiana que sigue liderando la `Juve', a pesar de empatar en casa, su novísimo Juventus Stadium con su parking para 4.000 vehículos, un restaurante de lujo y una veintena de bares.
Sin salir de la capital lombarda, el irregular Milan -en los últimos veinte días, un empate ante el Nápoles y derrotas frente al Inter y la Lazio- se quedó sin marcar durante dos partidos seguidos de liga por primera vez desde setiembre de 2009, mientras que la nota menos agradable la puso el problemático y genial Zlatan Ibrahimovic, que recibió su tercera tarjeta roja con los rossoneri, quinta en su paso por el fútbol italiano. Desde su regreso en 2010, nadie ha sido expulsado más veces que el sueco. Con el Barça lo fue una.
En la Ligue 1 francesa, el Paris Saint-Germain continúa como líder intratable tras vencer 3-1, con dos goles de Nenê, y aventaja en tres puntos al Montpellier, mientras tercero sigue el Lille, que no pudo jugar su partido por el tiempo -el árbitro decidió detener el Saint-Étienne-Lorient a los diez minutos-.
Neymar llega a los cien goles
En cuanto a los goleadores europeos, Cristiano Ronaldo intenta reeditar su galardón tras la impresionante cifra de 40 goles que alcanzó la pasada temporada, pero necesitará aguantar la presión que le ponen Messi y el capitán del Arsenal, Robin van Persie, que hizo un triplete.
Pero otro goleador les ha robado estos días el protagonismo. El mismo que dijo de Cristano aquello de que «él es bueno; guapo soy yo». Y todo por los 100 goles que en toda su carrera alcanzó el domingo la estrella brasileña Neymar, día en que celebró a lo grande su 20 cumpleaños. El astro del Santos ha materializado sus cien tantos -82 con su club, ocho con la selección nacional absoluta, nueve con la sub-20 y uno con la sub-17- en solo 186 partidos.
Curiosamente, Neymar no es el primer ídolo del Santos que perfora la meta contraria en su vigésimo cumpleaños. Pelé lo hizo el 23 de octubre de 1960, pero a esa edad O Rei ya había firmado la increíble cifra de 343 realizaciones. Con esos números no extraña que el carioca retara a Messi hace unos días al decirle que «cuando Messi haya marcado 1.283 goles y ganado tres Mundiales, hablamos».
Fabio Capello ya es historia en la selección inglesa. Ayer acordó con la Federación su cese inmediato como técnico, a apenas cuatro meses de la Eurocopa, tras haber defendido que John Terry siguiera siendo el capitán de la selección. La idiosincracia del italiano nunca encajó con los peculiares usos morales-deportivos de las islas, que ya privaron a Terry del brazalete antes durante unos meses tras trascender una relación con la mujer de su compañero de selección Wayne Bridge.
Y el central del Chelsea ha sido también desencadenante final del adiós de Capello. La Federación Inglesa había determinado hace unos días que perdiera la capitanía definitivamente ante la probabilidad de sufrir una fuerte sanción por insultos racistas en el campo, algo que en ligas como la italiana o la española -las que conoce Capello- nunca sería castigado. Si a Luis Suárez (Liverpool) se le impusieron ocho partidos por ello, en el caso de Terry se especula con que aún serán más cuando concluya el expediente, lo que para la Federación le inhabilitaba para ser capitán. Capello ni lo entendió ni lo compartió, y anoche se confirmaba que se marcha de un portazo. Tampoco apenará demasiado a nadie, pese a la expectación que despertó su llegada en 2007. El estilo del italiano, contracultural para unos jugadores acostumbrados al ataque y a la velocidad, ni ha encajado ni ha dado resultados. Su paso por Sudáfrica fue penoso a nivel de juego e irrelevante en resultados (a Inglaterra la echó Alemania en octavos con un 4-1 en el partido marcado por el gol fantasma anulado a Lampard).
De hecho, estaba cantado que Capello no seguiría tras la Eurocopa y sería reemplazado por Harry Redknapp, hoy técnico del Tottenham. Precisamente ayer Redknapp fue absuelto de una acusación de evasión de impuestos, que era el principal obstáculo para llegar al banquillo nacional. Lo dicho, que en el fútbol inglés no hay tiempo para aburrirse. GARA