La eufórica noche copera del martes sigue rumiándose entre la hinchada rojiblanca, que ni siquiera olvidó nombrar al presidente sevillista Del Nido en sus cánticos al final del partido. No hubo invasión -lo que el club agradeció ayer públicamente- y ni los jugadores exteriorizaron de largo lo que en la semifinal de hace tres años. Pero sí hubo gestos y manifestaciones que en el día después bien merecen ser rescatadas.

Una de ellas fue el arrope que Fernando Llorente recibió de sus compañeros en el centro del campo, después de que atendiera a una televisión. Todos se abalanzaron sobre él para darle un sentido `achuchón'. Luego, el delantero tendría palabras que han sonado a renovación: «Dan ganas de quedarse aquí toda la vida», confesó, tras alabar el «ambiente de locura» vivido. «Lo que más me importa es conseguir un título con el Athletic, que es lo más grande que hay», añadió. Luego, en su Facebbok colgó: «San Mamés es el mejor campo del mundo y sois la mejor aficion del mundo».

El propio Josu Urrutia, en sala de prensa, dio más pistas: «Su intención es seguir con nosotros y esa es una prioridad que cualquiera debe tener para renovar». Y por si fuera poco, a Iker Muniain se le escapó un «está a punto de cerrarse» sobre la renovación del `9'.

Marcelo descubrió a San Mamés

Otro que habló y sentó cátedra fue Marcelo Bielsa, sobre todo cuando respondió que su objetivo «no es jugar la final, sino ganarla». Y no es bilbaino. No es de extrañar que en las redes sociales ya circule un leiv motiv para la final copera de mayo: «En 2009 fuimos a Valencia a competir. En 2012 iremos a Madrid a ganar».

Sobre lo vivido en La Catedral, el argentino desde luego que no va a sorprenderse, viniendo como viene de vivir fraticidas clásicos como los de Newell´s-Rosario Central. Pero sí dijo que «nunca había visto al público tan implicado, influyente y alegre. Tenía muchas referencias de esa explosión, pero es distinto escucharlo que verificarlo». Por cierto, Bielsa es el primer técnico argentino en 14 años que lleva a su club a una final de Copa, tras Héctor Cúper.

La «pócima» de los jugadores

No cabe duda de que las gargantas de San Mamés llevaron en volandas al equipo, pero también lo hizo la pócima, eso sí, nada mágica, que se vienen tomando antes de cada partido copero. Lo reveló Ander Herrera: los jugadores acuden a una habitación la noche antes para tomarse un Cola-Cao. «El que no lo toma no puede venir», dijo el bilbaino, en cuya habitación se citaron el lunes, aunque lo habitual ha sido que la party la acojan Muniain o Amorebieta. «Seguro que el día antes de la final lo haremos», avanzó Herrera. Cola-Cao y, según desveló entre risas Iker, «tostadas con nocilla... Lo típico antes de un partido».

Por cierto, mucho de ambas cosas deben de haber tomado Autenetxe, Iturraspe e Iraizoz, los únicos leones que han disputado todos los minutos en este torneo del KO.