El veterano Liam Neeson intenta sobrevivir en el corazón de Alaska al «Infierno blanco»
M. I. | DONOSTIA
Producción de los hermanos Scott, Ridley y Tony, dirigida por el especialista en cine de acción Joe Carnahan. El realizador de «Narc» y «Ases calientes» siempre rinde a más altura cuando hace películas teóricamente pequeñas que puede controlar, razón por la que, tras quedar desencantado con los resultados de la superproducción «El Equipo A», vuelve al terreno abarcable en el que mejor se mueve. Y no me refiero a lo paisajístico, ya que «The Grey» («Infierno Blanco») apuesta por los grandes horizontes de Alaska, en su estampa más gélida e inhabitable.
La película es fiel al género survival, pues narra las aventuras de un grupo de supervivientes comandados por un cazador de lobos al que da vida el veterano actor irlandés Liam Neeson, quien exhibe una estupenda forma física. Es el más duro de todos, aunque el resto no son unos niñatos ni nada parecido, al tratarse de los trabajadores de una prospecciónpetrolífera. Cuando uno de los vuelos que les transporta se accidenta en medio de la nieve, quedan expuestos al ataque de los lobos. El experto en estos animales depredadores aconseja adentrarse en el bosque para no ser un blanco tan fácil, pero el remedio resulta ser peor que la enfermedad. La presencia de la manada es tratada visualmente mediante efectos terroríficos.