NUEVO TIEMPO EN EUSKAL HERRIA
La izquierda abertzale constata que la solución solo llegará con la política
La declaración del ministro del Interior español, Jorge Fernández Díaz, de que «el problema de ETA tiene una dimensión política» ha sido calificada por la izquierda abertzale como «un paso en la buena dirección» y como la constatación de que «la resolución solo será posible a través de la política». Otros agentes vascos consideraron, que en coherencia con esa afirmación, debe abrirse paso un diálogo político sin exclusión alguna.
GARA | DONOSTIA
La admisión de la «dimensión política» que subyace tras «el problema de ETA» ha sido recibida unánimemente como un giro en el discurso del Gobierno del PP. La izquierda abertzale también aprecia las palabras de Jorge Fernández Díaz, ministro del Interior, como «un paso en la buena dirección». Así lo valoró Joseba Permach en una nota de prensa en la que considera asumido por el Ejecutivo español el concepto de que «la resolución solo será posible a través de la política».
Esta cuestión ya figuraba en la Declaración de Aiete suscrita por líderes representantes de la comunidad internacional, y que en su cuarto punto sugería «que los actores no violentos y representantes políticos se reúnan y discutan cuestiones políticas, así como otras relacionadas al respecto, con consulta a la ciudadanía, lo cual podría contribuir a una nueva era sin conflicto». El grupo liderado por Kofi Annan ofrecía además su ayuda para ello en esta declaración que dio paso, apenas cuatro días después, al cese definitivo de la lucha armada de ETA.
Cuatro meses después de todo ello, el nuevo Ejecutivo español ha reconocido con más claridad que nunca esta «dimensión política», a través de la intervención del ministro del Interior en respuesta a una interpelación de UPyD que iba en sentido radicalmente contrario, ya que proponía al PP cerrar totalmente esa vía mediante la ilegalización de Bildu y de Amaiur. Fernández descartó recurrir a esa vía, argumentando que no hay razones para ello y que lo procedente es esperar al dictamen del Tribunal Constitucional sobre Sortu, y es ahí donde añadió que se debe tener en cuenta el fondo político del conflicto y la necesidad de ganar esa batalla que se librará esencialmente en Euskal Herria.
Para la izquierda abertzale, la declaración resulta «importante tanto por el fondo como por la forma», ya que fue realizada desde la tribuna del Congreso.
En coherencia con ella, Joseba Permach llamó al Gobierno de Mariano Rajoy a «que responda con responsabilidad, compromiso y altura de miras a la oportunidad histórica para la resolución del conflicto político. En este sentido, le instamos a que se superen las políticas y medidas de excepción implementadas a lo largo de las últimas décadas, desactivando la política penitenciaria de excepción que se aplica a los presos políticos vascos y legalizando las organizaciones políticas a día de hoy ilegalizadas».
Junto a ello, la nota añade que «la izquierda abertzale considera que es imprescindible abordar el diálogo que permita la resolución del conflicto en toda su dimensión. Así, consideramos que los estados español y francés deberían de abordar el diálogo con la organización ETA, el cual se tiene que ceñir exclusivamente a las consecuencias derivadas del conflicto político y la superación definitiva de la confrontación violenta».
«Del mismo modo, llamamos a todas las formaciones políticas, y de forma especial al PP, a entablar un diálogo político incluyente en clave democrática para desatar las causas, desatar los nudos históricos del conflicto -concluye Permach-. En ese diálogo todas las culturas del país son necesarias, por lo que las fórmulas planteadas desde la exclusión están abocadas al fracaso».
Etxaide y Ugarte
LAB y la Diputación de Gipuzkoa (liderada por Bildu) también concedieron gran valor a la declaración del ministro Fernández. Para la portavoz de la institución foral, Larraitz Ugarte, su afirmación puede tomarse como «un hito histórico que va en el buen camino».
En una entrevista concedida a Onda Vasca, Ugarte consideró que las palabras de Fernández desde el Congreso fueron «bastante llamativas» y constatan una «modulación» dentro del PP. Admitió también que otra cosa diferente fue lo expresado por su principal dirigente vasco, Antonio Basagoiti, un día antes en la sala de prensa de La Moncloa. La portavoz lo atribuyó a que Basagoiti «está en la postura inmovilista hasta que no pueda más», pero auguró que «la realidad se le va a imponer».
La secretaria general de LAB, Ainhoa Etxaide, también valoró como «un paso» las palabras del ministro del Interior del Gabinete Rajoy, y les otorgó peso en la medida en que «si admite que hay un problema político, eso nos acerca a tener que hablar de soluciones políticas. Si escondes o niegas el problema, nunca vas a llegar a la solución. Pero si estamos todos en ese camino, existirá la posibilidad real de dar pasos efectivos».
No obstante, en esta entrevista a Radio Popular la líder de LAB recordó que sigue habiendo «sectores muy cómodos» en esta situación actual, «que no se quieren situar en una realidad y hacen planteamientos del pasado con mucha nostalgia». En concreto, Etxaide consideró que los partidos vascos «deberían estar haciendo más» porque «aún no se ha abierto el debate real que va a llevar a construir las soluciones».
Garaikoetxea
El expresidente de EA y exlehendakari, Carlos Garaikoetxea, también se refirió al discurso de Fernández Díaz durante una entrevista en los micrófonos de Radio Euskadi, aunque en su caso se mostró menos sorprendido y consideró que las palabras del ministro del Interior no dejan de ser «una aproximación a la obviedad: que existe un problema político que es estúpido ignorar».
En este sentido, Garaikoetxea trajo a colación que «el país lleva convulso 200 años», que «el nacionalismo vasco está desde el siglo XIX diciendo que hay una nación que tiene derecho a expresar su voluntad democrática y a ser reconocida» y que «ha habido 40 años de represión espantosa».
En este escenario, Carlos Garaikoetxea consideró que ahora «es una labor de todos, y de los poderes públicos desde luego, salir del lenguaje oficialista y de las palabras de rigor para reconocer que aquí ha habido un problema político de fondo».
Fernández reiteró ayer sus palabras, pero poniendo énfasis en que lo que quería remarcar es que ahora hay que lograr una «victoria política» ante ETA.
El ministro de Interior no hizo ascos ayer a la propuesta revelada por Iñigo Urkullu (PNV) y trasladada ya a Rajoy en su reunión en Moncloa: promover una «habilitación parlamentaria» para el PP, similar a la de 2005. Fernández no lo rechaza.
La acometida de UPyD contra el PP, al que acusó de «cobardía» por no impulsar la ilegalización de Bildu y Amaiur, ha crispado sus relaciones. Iñaki Oyarzábal, número dos de Basagoiti, señaló ayer que a Rosa Díez «ya la conocimos aquí» y que «lo mismo estaba a favor del GAL que de las conversaciones de Argel». GARA
Amaiur ha registrado esta pregunta para el próximo pleno de control al Gobierno: «¿Cuál va a ser la aportación del Gobierno para la resolución definitiva e integral del conflicto político vasco?». Va dirigida a Rajoy, pero este podría delegar.
El lehendakari, Patxi López, en el transcurso de una entrevista con GARA que este diario publicará el domingo, mostró su apoyo a las palabras del ministro de Interior, Jorge Fernández, sobre la «dimensión política» del final de ETA.
Preguntado sobre la trascendencia que ofrecía a las manifestaciones del ministro, dado que en ocasiones sus declaraciones parecen contradecirse de unas a otras, el lehendakari respondió que «más allá de las contradicciones y de que no es muy lógico que un día diga que ETA se está rearmando y al siguiente que no es cuestión policial sino política, más allá de eso, en lo que no quiero entrar, si lo que el ministro quería decir es que la política tiene que ayudar a este tiempo, perfecto, estamos de acuerdo».
Según explicó el lehendakari, «la política tiene que servir para avanzar en la convivencia, en la concordia y en la normalidad de la sociedad vasca». Asegura López que así se lo trasmitió también en La Moncloa al presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, del que espera que comparta la misma opinión. Iñaki IRIONDO
Europako Batzordearekin aurretik iragarri gabeko bilera egin du Rodolfo Ares Lakuako Barne sailburuak. Helburua, gero zehaztu zuenez, ETAren jarduera armatuaren behin betiko etetearen berri ematea zen. Cecilia Malmström Europako Barne komisarioari Euskal Herrian esan duen gauza bera jakinarazi dio Aresek; hau da, ETAk inolako ekimenik ez duela gauzatu urriaren 20an erabaki historikoa kaleratu zuenetik. Ekintza armaturik ez du egin, ez eta mehatxurik ere.
Aresek nabarmendu zuen informazio hori «oso argiki» eman ziola Europako Batzordeari. Malmströmek ere bileraren gaineko balorazio positiboa egin zuen. Albiste honek Europako erakundeek ere Euskal Herrian gertatzen ari dena gertutik segitzen dutela frogatzen du.
Halaber, Lakuak biktimei begira abiatu nahi dituen ekimenentzako laguntza eskatu zuen Rodolfo Aresek Europan, zehazki, eraiki nahi duten memorialerako. Hori bultzatzeko prest ageri da Europako Batzordea, Malmströmek onartu zuenez. Irlandan izan zuten Peace izeneko diru laguntza programaren antzekorik ezartzeko asmorik, ordea, ez du agertu Bruselak.