El Chivas de Guadalajara mexicano consiguió este fin de semana corregir su vacilante derrotero en la competición nacional, tras certificar su primera y largamente anhelada victoria, un triunfo que ha coincidido con la llegada del nuevo asesor del club y leyenda holandesa Johan Cruyff. Hasta aquellos lares se ha ido El Flaco, un destino nada exótico si consideramos que su hijo Jordi, ex del Barça, Manchester y hasta del Glorioso Alavés, ejerce de director técnico en el AEK Larnaca chipriota tras haberlo hecho en la Liga maltesa. Y es que los caminos del balompié son inescrutables.

Que se lo digan a un viejo conocido y tocayo en aquella Naranja Mecánica como Johan Neeskens, actualmente técnico del Mamelodi Sundowns, líder de la Premiership sudafricana, donde sigue marcando goles -de chilena el último partido- el emblemático y veterano delantero Benni McCarthy, exceltiña, fichaje estrella de los Orlando Pirates, tras 14 años en Europa.

Porque uno sabe dónde empieza en esto del fútbol, pero no dónde acaba. Claro, si no eres Ryan Giggs, que tuvo el domingo dos motivos de celebración. Porque no solo marcó en el tiempo de descuento el gol del triunfo por 2-1 sobre el novato Norwich City, sino que además el inoxidable volante de 38 años cumplió su partido oficial 900 con los Red Devils. Nada menos que 7.666 días después de su estreno en marzo de 1991.

Todo lo contrario de aspirantes como Franck Songo'o. Seguro que el apellido les suena, a aquel portero camerunés que con éxito defendió la portería del Deportivo gallego. Pues Franck, su hijo, acaba de firmar con su décimosegundo equipo... con solo 24 años. Hace una semana lo hacía con el Portland Timbers, de la MLS yanki.

Más nombre -al menos en el fútbol europeo- tiene un joven llamado John Guidetti, revelación en la Eredivise holandesa, donde lleva anotados 18 goles en 16 partidos y ya se le ve como recambio de los Larsson o Ibrahimovic. De ascendencia italiana, inició su trayectoria futbolística con 6 años en las categorías inferiores del Brommapojkarma sueco, y la continuaría en territorio africano jugando para escuelas de fútbol muy modestas de Nairobi.

Con 14 años regresó al país escandinavo para volver a enrolarse en las filas del club de la capital sueca. Siendo apenas un quinceañero, Guidetti fichó por el Manchester City, para volver un año después cedido al Brommapojkarma. Pero poco después decidió hacer de nuevo las maletas e irse cedido durante un mes al Burnley inglés.

El pasado verano expiraba su contrato con el City y el Twente holandés se interesó por él, aunque los skyblues reaccionaron y renovaron al delantero. Pero, poco antes de acabar la época estival, Guidetti se incorporó como cedido al Feyenoord, donde es la revelación. «Mi sueño es convertirme en el mejor jugador del mundo», ha dicho ambicioso, declaración que nos recuerda a aquella del danés exArsenal Nicklas Bendtner -que hoy juega traspasado en el Sunderland-. El máximo artillero de los de Rotterdam sí demuestra tener las cosas claras sobre volver a Manchester: «No quiero estar en el banquillo». Veremos a dónde va su futuro.

Por cierto, el Feyenoord cayó por 3-2 en el clásico holandés ante el PSV, sin Guidetti, que fue expulsado la jornada anterior por una doble amarilla, la segunda por quitarse la camiseta tras marcar. ¡Esa cabeza!

Capitanes menores de edad

Otro que sí que ha cambiado de aires es Cekulajevs, ¿recuerdan, aquel estonio que lideraba la Bota de Oro? «Vi un titular en UEFA.com que decía que Ronaldo había sido desplazado por mí a la segunda plaza en la lucha por la Bota de Oro. Fue bonito y raro, porque yo estoy en otro universo distinto del portugués», dijo no hace mucho subrayando la brecha entre uno y otro fútbol. Pues ha fichado por El Valletta, el campeón maltés.

También ha hecho las maletas el Zar Andrey Arshavin, que a sus 30 años vuelve cedido hasta el mes de julio al Zenit St Petersburg ruso, después de llegar a un acuerdo con el Arsenal, por el que fichó como una estrella al alza tras aquella enorme UEFA y Eurocopa de 2008. Y quien ha encontrado equipo es el maliense Mahamadou Diarra, ex del Madrid y Mónaco, y que sin ficha y a sus 30 años ha acordado su llegada al Fulham inglés.

Carreras futbolísticas por hacer, otras a medio camino, otras en su declive. Imposible pronosticar el futuro. Como el de un chaval de solo 17 años y de nombre Mitch Cooper. Nacido en la isla de Vanuatu -donde ahora es un héroe-, en ausencia del capitán habitual del Gold Coast United -colista australiano-, el entrenador le asignó a su corta edad y en su debut profesional el brazalete de capitán e incluso marcó un gol, lo que no le valió al entrenador para evitar que fuera destituido por ese gesto antes del encuentro.

En Europa, ningún jugador menor de 18 años ha ostentando la capitanía de un gran club. El exinternacional inglés Ray Wilkins tomó las riendas del Chelsea a los 18 cuando los blues estaban en la Segunda División y los capitaneó a la Premier League ese mismo año. El escocés Gary Gillespie, que llegó a jugar en el Liverpool de la década de los 80, fue capitán del escocés Falkirk a los 17 años en 1977.

Ser capitán a esa edad, como se observa, no es nada sencillo. Como tampoco que dos gemelos marquen en el mismo partido. Lo hicieron Rogelio Gabriel Funes Mori y Ramiro Funes Mori, este domingo con el River Plate argentino, algo que no sucedía desde hacía 44 años. Por cierto, que David Trezeguet volvió a marcar para los Millonarios. Su rival, aunque en Primera, Boca, suma por su parte 34 partidos invicto y marcha líder.

Inter, «por favor, ganad»

No puede decir lo mismo el Inter de Milan, que ha sumado su quinta derrota consecutiva. Es la primera vez que el club atraviesa una racha semejante desde el fichaje del capitán Javier Zanetti, hace 17 años. «Por favor, ganad. De otro modo, mis amigos se burlarán de mí en el colegio. Gracias, Filippo». Era el mensaje de un seguidor de 9 años, que trascendió a los medios de comunicación, pero que no sirvió para frenar la sangría. Al menos, el club le invitó a asistir a una sesión de entrenamiento y le entregó una camiseta firmada por el propio Zanetti por todas las molestias causadas.

Tampoco quedaron contentos Milan y Juventus -25 partidos seguidos sin perder llevan los biannconeros- tras su empate a uno del pasado sábado que deja todo como estaba en el Calcio. Curiosamente, un jugador de la cantera del Milan (Matri) marcó para la Juve y uno de la cantera de la Juve (Nocerino) marcó para el Milan. Pero fue más llamativo que en los baquillos de San Siro estaban sentados 340 goles en Serie A, los marcados entre Del Piero (185) e Inzaghi (155).

Los otros clásicos en las Islas

El otro duelo europeo, el Arsenal-Tottenham, se saldó con un rotundo 5-3, tras ir 0-2. Eso sí, Emmanuel Adebayor se convirtió en el segundo futbolista que logra marcar con las camisetas de los dos equipos en el clásico del norte de Londres. Pero no fue el único clásico británico.

El Belfast Old Firm norirlandés se lo llevó el protestante y unionista Linfield ante el `pro-irlandés' Cliftonville. Lejos quedan hechos trágicos como aquel derbi de 1948 entre el Linfield y el católico Belfast Celtic, cuando el linchamiento de estos últimos por los hooligans en casa del primero terminaron con la desaparición del club y con Jimmy Jones, su estrella -curiosamente, protestante-, malherido y con su guante de pierna derecha partida en dos.

El otro duelo histórico fue el Steel City Derby o `derbi de la ciudad del acero', en un partido de la Tercera División inglesa, la League One, y ante nada menos que 36.364 espectadores. Por 114ª vez en la historia Sheffield Wednesday y Sheffield United se veían las caras. Owls y Blades, segundo y tercer clasificado, dirimieron uno de los choques más tradicionales y antiguos del fútbol de las islas, con victoria para los primeros y ni una sola tarjeta mostrada. Rivalidad, pero bien entendida, tanto que ambos rivales aspiran a ascender de categoría a la vez y hasta comparten patrocinadores.

Por las mismas Islas, un grande, el Celtic de Glasgow, sumó su vigésimo triunfo consecutivo ante su público, la mejor racha en la historia del club católico. En la secuencia actual, junto con la penalización administrativa de 10 puntos impuesta al Rangers, otorga a los Bhoys una renta de 20 puntos sobre su histórico oponente, que hace tan solo tres meses encabezaba la clasificación con 15 de ventaja.

Y, sin dejar el lugar donde se inventó el fútbol moderno, por fin el Liverpool, seis años después, volvió a levantar un título, la Copa inglesa, a los penaltis, contra el Cardiff escocés y gracias al lanzamiento errado por su capitán Anthony Gerrard, que le hizo un favor a su primo, el capitán red, Steve Gerrard. Y es que los caminos del fútbol...