El Gobierno de Lakua pondrá en marcha antes de dos meses un servicio de mediación que logre evitar el «drama» que supone que el impago de la hipoteca termine en desahucio, según anunció ayer el consejero de Vivienda, Obras Públicas y Transporte, Iñaki Arriola.

En su intervención, Arriola explicó que los departamentos de Justicia y Vivienda de Lakua ultiman junto a la asociación Stop Desahucios, representantes de la Administración de Justicia y de las entidades financieras un servicio de mediación que tratará de evitar que los impagos de las hipotecas terminen en ejecuciones hipotecarias.

Explicó que es una «segunda oportunidad» cuando ha fracasado la primera negociación entre el cliente y su banco, para alcanzar un acuerdo que sea viable respecto a la capacidad económica de la familia afectada y plantear así «una liquidación ordenada de la deuda».

El servicio vasco de mediación funcionará de manera similar al que ya existe en Catalunya con el objetivo de que las familias mantengan sus viviendas mediante la renegociación de las condiciones de la deuda con el banco, en un acuerdo que será «de interés para las dos partes afectadas», como fase previa para evitar una intervención judicial.

Favorecer el alquiler

Preguntado en el coloquio posterior a su conferencia, Iñaki Arriola también se pronunció en contra de la liberación del sector inmobiliario, porque muchas familias «no tendrían capacidad real de acceso a una vivienda, ni siquiera a un alquiler a precios de mercado», pero sí es partidario de «un cambio en el sector para favorecer el alquiler» sentenció.