El Parlamento navarro escucha a puerta cerrada la situación de los presos enfermos
Aritz INTXUSTA | IRUÑEA
El Parlamento navarro debatió ayer, a puerta cerrada, sobre la situación de los presos políticos enfermos. Los encargados de acercar esta realidad a la Cámara navarra fueron miembros de Jaiki Hadi, que entraron en detalle sobre los cuatro presos enfermos navarros: Iñaki Erro, Jesús María Mendinueta, Iñaki Etxeberria y Josetxo Arizkuren. Mientras se discutía puertas adentro, frente al Parlamento se desplegó una protesta reclamando la excarcelación inmediata de estas personas convocada por Herrira.
Los médicos Ohiana Barrios, Mari Kruz Lanza y Koldo Morras expusieron a los parlamentarios la situación del colectivo de presos políticos, centrando su intervención en el documento «Cárcel y Salud». La aceptación de esta comparecencia en comisión, solicitada por Bildu y NaBai, merece para el movimiento Herrira una «valoración positiva, porque se ha podido explicar la grave situación por las que atraviesan estas personas».
A pesar de que el objetivo principal de la sesión de ayer del Parlamento era obtener un posicionamiento claro sobre la situación de los cuatro presos enfermos navarros, Fran Balda, portavoz de Herrira, quiso poner el foco en la situación de Txus Martín, que es la más preocupante en este momento de todo el colectivo. Según Balda, el mantenimiento de Martin en prisión corre riesgo de tener consecuencias irreversibles en un plazo corto de tiempo. Herrira también recordó que, para dos de los enfermos navarros, hace tiempo que llegó la hora de regresar a sus casas, puesto que el único motivo por el que siguen entre rejas es la aplicación de la Doctrina Parot.
Por lo que ha podido saber este periódico, el debate dentro del Parlamento no estuvo a la altura. PSN y UPN prefirieron entrar en debates secundarios como el de si se puede hablar de estas personas como presos políticos o si esta no es la denominación adecuada. En particular, Begoña Sanzberro (UPN) enumeró los motivos por el que fueron apresados como si esos hechos tuvieran algo que ver con su derecho a recibir la atención médica adecuada. Por su parte, Maite Esporrín (del PSN) no intervino en el debate, aunque su profesión es la de enfermera.
Bakartxo Ruiz, la portavoz de Bidu, reivindicó la necesidad de la excarcelación inmediata de estas cuatro personas «porque la propia ley así lo exige». Asimismo, enmarcó el debate dentro de la lógica política que se deriva de la situación actual y denunció una política carcelaria «de venganza y con medidas de excecpión». Por NaBai, fue Juan Carlos Longás, quien defendió la necesidad de excarcelar a los presos enfermos. Longás citó la legislación internacional y la carta de los Derechos Humanos para rechazar la tortura. Esta postura contó con al apoyo parcial de Izquierda Ezkerra.
El representante del PP, pese a a alinearse dentro del bloque de UPN-PSN, sí que admitió que el derecho a la salud es algo que se debe de reconocer y garantizar a todas las personas que se encuentran en prisión.