Durante la jornada de ayer se sucedieron las conversaciones a distintas bandas entre los partidos parlamentarios para tratar de alcanzar un acuerdo sobre la posibilidad de crear un foro o ponencia que abordara la gestión del nuevo tiempo. Hubo momentos en los que pareció posible un consenso entre algunas partes, pero finalmente todo queda a la espera de lo que diga hoy el lehendakari. Además, da la impresión de que el PSE no quiere dejar fuera de juego al PP, puesto que su intención es la de «ampliar» el pacto alcanzado en el Congreso de los Diputados.

La pretensión de Patxi López de acudir a la Cámara autonómica para fijar una hoja de ruta que pudiera marcar el camino del resto de partidos se ha visto en buena medida cortocircuitada por la maniobra de Aralar, que retrasó al pleno de hoy dos mociones que tenía presentadas para la semana pasada.

En una de ellas, Aintzane Ezenarro propone la creación en el Parlamento de Gasteiz de una ponencia abierta a los grupos políticos, resto de instituciones y agentes sociales que trabajan en el campo de la pacificación, sin ningún tipo de exclusión, con los objetivos de «debatir y consensuar el tipo de soluciones que se debe dar a las consecuencias del conflicto» y «trabajar y difundir la cultura de la paz en nuestros pueblos y barrios, y debatir y consensuar las iniciativas a tomar para impulsar la convivencia».

PP y UPyD presentaron dos enmiendas de rechazo total a esta pretensión. Pero la del PSE se limita, de forma deliberadamente escueta, a solicitar la constitución en la Cámara autonómica de «un foro para la convivencia», con la finalidad de impulsar y seguir las actuaciones a llevar a cabo para conseguirla. Evidentemente, con su enmienda, este partido no podía dar de víspera ninguna pista del que será uno de los ejes principales del discurso de hoy del lehendakari.

El PNV no presentó ningún tipo de enmienda porque dice estar de acuerdo con lo planteado por Aralar, siendo consciente de que para que eso salga adelante necesitará de mayores apoyos. En una posición similar se encuentra Ezker Anitza-IU.

La izquierda abertzale

A nadie se le escapa que uno de los elementos claves para la viabilidad de cualquier foro que pretenda avanzar en la gestión del nuevo tiempo depende en buena medida de la participación en el mismo de la izquierda abertzale, que debido a la ilegalización se encuentra fuera del Parlamento, aunque a estas alturas las urnas han demostrado reiteradamente que es una fuerza insoslayable.

Si la creación de ponencias o foros se circunscribe expresamente al Parlamento, no sería fácil articular una fórmula que garantizara su participación permanente.

Eusko Alkartasuna llamó ayer la atención sobre esta cuestión y plantea que su apoyo a cualquier acuerdo pasa porque se posibilite la presencia normalizada de la izquierda abertzale en el foro que vaya a crearse.

La fórmula de la mesa

El presidente del EBB, Iñigo Urkullu, mostró hace unos días a través de su blog la disposición del PNV a acudir a una reunión conjunta de todos los partidos que convocara el lehendakari. Su oferta venía a evocar el funcionamiento de la Mesa de Ajuria Enea, un foro de partidos cuyas decisiones después eran refrendadas por el Parlamento.

Sin embargo, esta fórmula es desechada por Lehendakaritza por considerar que no es operativa. No ven posible avanzar en un órgano en el que estén presentes desde la izquierda abertzale hasta UPyD.

Esto hace pensar que tanto el lehendakari como el PSE prefieren apostar por un instrumento ceñido al Parlamento que deje al margen a la izquierda abertzale, aunque luego puedan tender puentes hacia ella a través de otros cauces.

Será a partir de conocer las bases que ponga Patxi López en su discurso de esta mañana, cuando los partidos vuelvan a entablar contactos para la búsqueda de algún acuerdo. El pleno comenzará con la intervención del lehendakari y los turnos de réplicas y dúplicas podrían alargarse durante unas tres horas. Esta parte de la sesión será retransmitida por ETB2.

Después, tras un punto intermedio, llegará el debate de las mociones presentadas por Aralar y la votación de las distintas propuestas que se presenten a la Cámara a partir de los textos y enmiendas que ya se han dado a conocer.