El Banco Santander paraliza el desahucio de una vecina de Laudio
El Banco Santander atendió ayer la reclamación de Obdulia Sastre, de 73 años y viuda, y paralizó el desahucio previsto para próximo día 26. La mujer estuvo asistida por la abogada de Stop Desahucios Bizkaia Miren Mentxaka, quien aseguró, antes de entrar al encuentro con los directivos del banco, que hasta la fecha «se habían negado a llegar a acuerdo alguno». Marta Uriarte, portavoz de esta asociación, pidió a todos los bancos «una postura similar».
Juanjo BASTERRA | BILBO
Obdulia Sastre, viuda de 73 años y con un hijo en paro a su cargo, entró a la reunión con la dirección del Banco Santander en Bilbo con «pocas esperanzas», porque hasta la fecha la entidad no había aceptado llegar a ningún tipo de acuerdo. «Si no lo paran hoy, me veo en la calle. No tengo ni un duro y mi hijo lleva tres años en paro. Vivo malamente», indicó la afectada, angustiada.
Sin embargo, ayer fue su día de suerte. Marta Uriarte, portavoz de Stop Desahucios Bizkaia, informó que el encuentro fue positivo. «Ha habido buena disposición del banco y ha paralizado el desalojo de la vivienda de Obdulia, que vive en Areta (Laudio)». Además, la entidad se ha comprometido a «negociar una salida para que puedan continuar en la vivienda».
Sastre, junto a dos de sus hijos, estuvo acompañada por el colectivo de Stop Desahucios. Su abogada, Miren Mentxaka, no entendía cómo se había llegado a esta situación, porque la afectada «nunca pidió nada para ella. Fue avalista de uno de sus hijos y por una cantidad ridícula el banco se ha quedado con el piso del hijo, con la propiedad de Obdulia y con un camarote».
Antes de acceder al encuentro con la dirección del banco, Mentxaka declaraba que hasta este momento «las gestiones han sido ineficaces» y que «si no arreglamos este auto judicial, esa señora con su hijo, con una pensión ridícula, y una situación espantosa, irá a la calle este mes. No tienen dónde ir». La abogada aseguró que «como ultima instancia hemos pedido al banco que nos reciba, para ver si conseguimos que les permita vivir en la casa. Es una vivienda muy sencilla, un cuarto piso sin ascensor y estamos abiertos a negociar una fórmula de arreglo para que esta familia no se vea en la calle».
La historia comenzó cuando uno de sus hijos pidió un préstamo al Banco Santander. Obdulia avaló el mismo, pero a su hijo le fue mal y dejó de pagar, sin que su madre lo supiera. Al final, les llegó el proceso cerrado desde el Juzgado de Instrucción de Amurrio. Ese hecho ha significado la ruptura de esa familia y el banco procedió a ejecutar el impago, por lo que se ha quedado con la vivienda y trastero del hijo y con el piso de la avalista. «Esta pobre mujer -explicó Mentxaka- sólo se dedicó a pagar esa vivienda y vive con un hijo en paro».
A las puertas de la sede central del banco en la capital vizcaina, recordaron que cerró 2011 con un beneficio atribuido de 5.351 millones y dedicó otros 3.183 de su beneficio general al saneamiento de la entidad.
Marta Uriarte, portavoz de la plataforma Stop Desahucios de Bizkaia, destacó que «es doloroso que a esta mujer la puedan dejar sin su vivienda, que pagó poco a poco con su marido, y precisó que Obdulia no está sola, sino que cuenta con nuestro apoyo». Tras el encuentro, la portavoz de Stop Desahucios explicó a GARA «la buena noticia y declaró que otros bancos deberían de tomar esa misma dirección para evitar el sufrimiento de la gente».
El vicepresidente de Kutxabank, Carlos Zapatero, señaló ayer que la entidad financiera es «plenamente consciente» del problema que representan los desahucios, pero indicó que la ley hipotecaria «es la que es y hay que sujetarse a ella». Del mismo modo se pronunció hace unas semanas el presidente, Mario Fernández.
Zapatero se refirió de esta manera en una rueda de prensa a los desahucios que se producen en Hego Euskal Herria, respecto a los que indicó que «cuando ha habido un problema extremo», Kutxabank lo ha analizado y ha intentado encontrar una solución. Este extremo no ocurre con frecuencia en Kutxabank, como ayer mismo atestiguó Marta Uriarte, portavoz de Stop Desahucios y que este mismo lunes comenzó una huelga de hambre y sed, que tuvo que abandonar por prescripción médica, «dado que ese banco se niega a buscar una solución y, por otro lado, no acepta la dación en pago del piso para saldar la deuda hipotecaria».
Carlos Zapatero explicó que las relaciones crediticias «se han producido con un determinado planteamiento al que hay que atenerse». No obstante, afirmó que ello no significa que la entidad sea «absolutamente fría y poco sensible» respecto a esta cuestión, ante la que se ha mostrado «plenamente consciente». Sin embargo, la manera de proceder de unos y otros bancos es diferente ante la misma ley. El hecho real es que en Hego Euskal Herria desde el año 2007 se han producido 7.377 desahucios hasta el mes de setiembre de 2011, siendo Gipuzkoa y Nafarroa donde mayor ha sido la incidencia de los mismos. J.B.
