Rinder Industrial es líder mundial en diseño y fabricación de equipos de alumbrado para la industria de automoción. ELA, LAB y UGT denunciaron ayer en Forua (Bizkaia) que la dirección ha planteado su cierre. Cuenta con un centenar de trabajadores. El comité denunció que «no vamos a permitir que, tras largos años de trabajo honrado y pingües beneficios que se han repartido los miembros del consejo de administración, nos dejen en la calle alegando que no hay suficiente carga de trabajo. Vamos a sudar la gota gorda para que nuestras familias no pasen penurias. Vamos a pelear para que esta planta no se cierre, porque es nuestro futuro».

Los trabajadores de Rinder Industrial explicaron a la opinión pública que «no somos mercancía, somos personas, y vamos a hacer todo lo que este en nuestra mano para que esta planta, que es nuestra empresa, no se cierre». De esta manera se expresaron ayer los representantes de ELA, LAB y UGT, que mostraron su preocupación por el futuro de la empresa, porque la dirección nos ha comunicado que va a cerrar».

Los representantes sindicales recordaron que en estos últimos años la dirección «ha hecho de las amenazas de cierre, los despidos, el impago parcial de salarios, el desvío de la cartera de pedidos, una práctica tristemente habitual». Denunciaron que ha trasladado maquinaria a otras plantas, «ha subcontratado pedidos y ha tomado todas las decisiones para hipotecar el futuro de la empresa, hasta llevarnos a una falta de futuro».

Aseguraron que llevan con diferentes expedientes de regulación desde hace tiempo, que les han recortado los salarios y «hemos dejado en el camino mejoras sociales, pero seguimos soportando la ineficacia de la empresa con nuestros salarios». ELA, LAB y UGT explicaron que «los accionistas han dejado morir esta empresa, que es la matriz del grupo de empresas que crearon a partir de los beneficios que durante décadas han obtenido de Forua. Es un imperio internacional con plantas en India y Vietnam, el Estado español, y en otros puntos de la CAV, un holding empresarial creado con el sacrificio y el sudor durante décadas de los trabajadores». Por lo que denunciaron que después de «montar ese imperio, quieren acabar con nuestro trabajo, los que les dieron esa riqueza de la que alardean en otros lugares».