La presa palestina Hana Shalabi cumplió ayer 23 días en huelga de hambre en contra de la «detención administrativa» que le impusieron tras su detención el 16 de febrero. Shalabi había sido excarcelada escasos cuatro meses antes como parte del intercambio acordado entre Hamas y el Gobierno israelí con mediación de Egipto para liberar a mil presos palestinos a cambio del soldado israelí Gilad Shalit. Para entonces llevaba más de dos años bajo «detención adminisitrativa», que no permite conocer los cargos. El miércoles, un tribunal militar israelí retrasó hasta mañana o el lunes la vista para analizar su situación.

Su madre, Badiya Shalabi, que también rechaza cualquier alimento en apoyo a su hija, hizo un llamamiento urgente a la comunidad internacional para que se solidarice con su hija. «Su vida se está apagando en prisión. Y la nuestra también», advirtió.

Israel mata a cinco palestinos

Por otra parte, el Ejército israelí mató ayer a cinco palestinos en varios ataques aéreos contra Gaza con los que respondió a lanzamiento de cohetes que no causaron víctimas. En el primer ataque dos cohetes alcanzaron a un coche matando al líder de los Comités de Resistencia Popular, Zuheir al-Qaisi, a otro miembro del grupo, Mahmud Hanani, -exiliado en Gaza tras ser liberado por Israel en un canje de prisioneros- e hiriendo de gravedad a un tercero. El segundo tuvo como objetivo el sur de la ciudad de Gaza y mató a tres militantes de las Brigadas Al-Qods, Obeid al-Gharabli, Mohamed Harara et Hazem Qureqa.