La plantilla de Anaitasuna comienza a resentirse de los efectos de una competición tan exigente como la Liga Asobal. Pese al descanso como consecuencia de la disputa de la Copa, los verdiblancos no han podido recuperar a ninguno de sus lesionados, por lo que visitarán en cuadro al Atlético de Madrid -Vista Alegre, 18.30-.

El técnico verdiblanco, Aitor Etxaburu, tiene nada menos que cinco bajas seguras. A las ya conocidas de Maxi Cancio, Pocholo y Paco López, se ha unido a última hora la del extremo Chocarro, de quien se conoció ayer que el tirón que sufrió ante el Naturhouse La Rioja era en realidad una rotura de fibras en los isquiotibiales, lo que le obligará a estar de baja por espacio de un mes. La quinta ausencia será la del lateral Rolandas Bernatonis, que continúa con las molestias en un hombro.

La situación aún se puede complicar todavía más si Miguel Goñi, duda hasta última hora, no consigue recuperarse de sus problemas físicos. Con este panorama, al entrenador eibartarra no le ha quedado otro remedio que convocar a tres chavales del filial: Kisselev, Etxeberria y Zuza.

Un rival en forma

Por si no fuera poco problema la plaga de lesiones, los verdiblancos tendrán que medirse a un rival muy exigente, que se encuentra en su mejor momento de la temporada y con la moral por las nubes. La que le ha insuflado su flamante triunfo copero frente al Barcelona y el haber dejado casi sentenciada la eliminatoria de octavos de Champions tras ganar en la cancha del Kadetten suizo por nueve goles (27-36).

Anaitasuna, en cualquier caso, se aferra a la sorpresa -tratará de emular a sus paisanos antonianos, que a punto estuvieron de ganar en el Palau el miércoles- con la ambición de que no tiene nada que perder y con el optimismo de haber ganado a La Rioja en la anterior jornada.