Los trabajadores de Bilbao Exhibition Centre (BEC) se concentraron ayer frente al mismo y llevaron a cabo un paro de dos horas que fue secundado por 35 de los 65 trabajadores de las instalaciones de Barakaldo contra la reducción de su sueldo en un 15% y para denunciar que la dirección del recinto ferial «pretende camuflar su mala gestión robando el salario» a la plantilla.

Según informó el comité de empresa, el pasado 22 de marzo, el consejero delegado del BEC, José Miguel Corres, comunicó a los representantes de los trabajadores, que «quiere aplicar una rebaja del 15% en el salario a todos los trabajadores». Con esta medida «que viene consensuada con los dos principales propietarios del BEC, Gobierno vasco y Diputación foral», se pretende -según explicó el comité- «ahorrar 500.000 euros en la partida salarios, sin valorar que casi la mitad de la plantilla perciben salarios inferiores a los de las entidades propietarias». «Ahora quieren que los trabajadores, como si de una cooperativa se tratara, paguemos de nuestro bolsillo las consecuencias de la pésima gestión que de estas instalaciones y personal ha hecho en estos años la dirección del BEC», denunció.

El comité adviritó asimismo que «los políticos que hace diez años decidieron el traslado de la Feria de Bilbo a Barakaldo para crear esta obra faraónica, son los únicos responsables de los millones de euros en pérdidas que tiene cada año, más de 40 en 2011».

Claros culpables

En ese sentido, criticó que tanto unos como otros pretenden que sean los trabajadores los que paguen por este agujero negro que «han creado ellos con el dinero de todos». Además, denunció que al tiempo que en Juntas Generales PSE y PNV instan al Parlamento a la retirada del Decreto Ley de la Reforma Laboral por absolutamente injusta con los trabajadores», el diputado general de Bizkaia y presidente de BEC, José Luis Bilbao, los alcaldes de Barakaldo, Tontxu Rodríguez, y de Bilbo, Iñaki Azkuna, el lehendakari, Patxi López, y el presidente de la Cámara de Comercio José Angel Corres, «puede que hagan uso de ella para rebajarnos a todos los trabajadores el sueldo y aplicarnos el descuelgue salarial de esta reforma laboral».

El comité y toda la plantilla de BEC hicieron «responsables al 100% a los dueños del BEC de la mala gestión, ya que es ésta y no otra la culpable de que la empresa esté perdiendo dinero».

«Solo de los gastos financieros (amortización del préstamo) BEC tiene que pagar al banco 16 millones de euros al año. Está claro que el problema del BEC no son los sueldos de la plantilla, sino la gestión de los dueños», recalcaron, para recordar que en los dos últimos años han sufrido una bajada salarial del 5% y una congelación de su salario. Por todo ello, instaron a la dirección que sea ella misma la que haga frente a las deudas.