Samuel Sánchez ganó ayer por tercer año consecutivo en la meta de Arrate al superar en los últimos metros a Joaquim Rodríguez y Chris Horner, sus dos mayores rivales. El asturiano logró además el maillot amarillo de la Euskal Herriko Itzulia tras una lección magistral en la última subida y un gran trabajo de Euskaltel durante toda la etapa.

Samuel se había marcado la victoria de etapa en su Santuario como mayor objetivo del día y allí estaban su familia para acompañarle con un triunfo que le acerca a los cuatro consecutivos que logró Bahamontes entre 1959 y 1962. Claro que tienen mucho más mérito los tres del ovetense, que para lograr el tercero demostró su sangre fría.

Euskaltel había endurecido la carrera en la primera ascensión de Ixua y en la de Urkaregi, cuando se quedó por delante un pequeño grupo de treinta corredores con seis integrantes del equipo dirigido por Gerrikagoitia. Pero cuando llegó Arrate desapareció el naranja de la cabeza del pelotón y el asturiano retrocedió posiciones para que los demás asumieran la iniciativa.

Como consecuencia de esa carrera táctica, un amplio pelotón subía Arrate a ritmo cicloturista a cinco kilómetros de meta, cuando Horner y Joaquim atacaron y pronto comprobaron que Samuel no se encontraba ante un mal día. Cuando quiso saltó para capturarlos y luego los tres colaboraron para llegar con una decena de segundos a un final en el que el asturiano volvió a lanzar la llegada como siempre para entrar primero en las últimas curvas y dar a Euskaltel en el sitio ideal su segunda victoria del año tras la de la Volta.

La táctica de Samuel, que priorizó la victoria de etapa, motivó que Arrate no marcara diferencias importantes y veinte corredores llegaron en un margen de doce segundos. Entre ellos destacó la presencia del campeón del mundo contrarreloj, Tony Martin, en su mejor actuación de la temporada.

Aunque la crono de Oñati no es ideal para los contrarrelojistas, Samuel, Horner y Joaquim deberían aprovechar el nuevo repecho final que estrenará hoy la llegada de Ibardin para distanciar al alemán. Ayer dieron la sensación de ser los tres corredores más fuertes y en una llegada como la de Bera no tendrá sentido una carrera tan táctica. Ante un repecho muy explosivo todos deberán dar el máximo y sacar el mayor tiempo que les permita llegar a Oñati con la diferencia necesaria para copar los tres cajones del podio final.

Buen día para Euskaltel

En ese camino la carrera marcha tal como quería Samuel Sánchez, que permitió a Euskaltel vivir un día muy importante. Aunque no es fácil centrarse en su tarea ante la incertidumbre que rodea al futuro del equipo, los ocho ciclistas naranjas, desde el primero al último, demostraron que este proyecto merece su continuidad tal como es.

Porque ganó Samuel, pero la victoria fue de todo Euskaltel Euskadi. Oroz y Azanza fueron los que trabajaron al principio para tener controlada la escapada que protagonizaron Christensen (Saxo) -que arrebató los maillots de la montaña y de las metas volantes al Caja Rural-, Veikkanen (FDJ), Herrada (Movistar), Piedra (Caja Rural) y Mucelli (Utensilnord).

Luego un espectacular Egoi Martínez, Verdugo, Antón y Gorka Izagirre cogieron el mando del pelotón en la subida a Ixua y de Urkaregi mientras Astarloza protegía al asturiano y en Arrate Samuel se bastó solo para manejar la carrera con su inteligencia. También Katusha demostró estar muy bien al atacar Losada, Vicioso y Caruso en Ixua y llegar Dani Moreno y Spilak con el primer grupo a meta.

Pero hoy mejor harán si se deciden a endurecer la carrera porque el repecho final de Ibardin es ideal para Joaquim y no pueden dejar desaprovechar la oportunidad de ganar y sacar la máxima diferencia para obtener la mejor clasificación final.